Travis Hunter: El Fenómeno Bidireccional que Revoluciona a los Jacksonville Jaguars

La apuesta de Jacksonville por una estrella histórica marca una nueva era para la franquicia y enciende el debate sobre los límites del talento en la NFL

Travis Hunter es mucho más que el típico novato del Draft de la NFL. Con su selección por parte de los Jacksonville Jaguars como la segunda elección global del Draft 2025, el egresado de la Universidad de Colorado no solo marca una nueva etapa para una franquicia con sed de protagonismo, sino que también está en camino de redefinir lo que significa ser un jugador en la NFL moderna.

Un cambio de paradigma: El salto histórico de Hunter

Sanamente obsesionados con la eficiencia, el enfoque especializado y los esquemas elaborados hasta el último detalle, los equipos de la NFL rara vez se desvían de lo establecido. Sin embargo, el caso de Travis Hunter representa una revolución táctica y filosófica. Los Jaguars entregaron una gran cantidad de activos de draft —su pick N°5, una segunda ronde (N°36), una cuarta (N°126) y su primera ronda de 2026— a los Browns para subir al segundo puesto y hacerse con el jugador más versátil del fútbol americano colegial.

Pero, ¿quién es exactamente este fenómeno que ha causado tanto revuelo?

Originario de Boynton Beach, Florida, Hunter brilló primero en Jackson State con Deion Sanders como mentor, y luego trasladó su magia a la Universidad de Colorado. Ahí, en tan solo una temporada completa, dejó una huella imborrable: 96 recepciones, 1,258 yardas y 15 touchdowns como receptor, complementados con 35 tacleadas, 11 pases defendidos y 4 intercepciones desde la posición de esquinero.

Una apuesta sin precedentes

Hunter no es solo un jugador polivalente, es una rareza: pretende desempeñarse en ambos lados del balón de manera regular en el máximo nivel, algo que no se veía desde los tiempos del legendario Chuck Bednarik con los Eagles, en los años 50 y 60. Antes que él, Deion Sanders intentó esa proeza en la era moderna, pero incluso el miembro del Salón de la Fama admitió que hacerlo a tiempo completo era una utopía.

“Mi meta es jugar ambos lados del balón en la NFL. Sé que puedo hacerlo. Y más importante, sé que puedo hacerlo a un nivel élite,”
—Travis Hunter, entrevista post-Draft

Esta declaración de intenciones, respaldada por su producción estadística y su descarada confianza, hizo que los Jaguars apostaran fuerte. Y es que no solo se trata de sus números, sino de su capacidad para influir en el juego de manera constante, sin importar en qué zona del campo se encuentre.

La arquitectura de una nueva era en Jacksonville

Los Jaguars no solo apostaron por Hunter, sino que también marcaron un rumbo claro con su nuevo cuerpo técnico y administrativo. James Gladstone (gerente general), Liam Coen (head coach) y Tony Boselli (vicepresidente ejecutivo) debutan este año en sus respectivos puestos, y necesitaban una movida icónica para iniciar su ciclo en la NFL. Con la adición de Hunter, ahora pueden presumir de tener una de las jóvenes tríadas más intrigantes del deporte junto al mariscal de campo Trevor Lawrence y al receptor Pro Bowl Brian Thomas Jr.

En el libreto ofensivo de Coen, Hunter presumiblemente ocupará un rol titular como receptor abierto. Sin embargo, ya se ha confirmado que su participación en paquetes defensivos específicos será parte del plan semanal. Esto representa un reto mayúsculo para un staff sin experiencia en manejar un talento de estas características.

¿Quién es Travis Hunter en el contexto histórico?

Para entender su grandeza potencial, hay que poner a Hunter en contexto. Pocos jugadores han sido capaces de combinar habilidades ofensivas y defensivas al punto de ser considerados élite en ambas. Algunos ilustres precedentes:

  • Chuck Bednarik: el “último de su especie”, fue linebacker y centro en los Eagles, jugó en ambas bandas por necesidad.
  • Deion Sanders: aunque ocasionalmente alineaba como receptor, su etapa como WR fue más anecdótica que impactante.
  • Julian Edelman: tuvo momentos jugando como cornerback en playoffs, pero jamás como rol permanente.

Es decir, la historia le da espacio a Travis Hunter para una narrativa propia.

La energía de un ícono universitario

Hunter no solo impactó en el campo, también fuera de él. Su presencia en el Draft, luciendo un blazer rosa neón y sonriendo ampliamente ante los flashes, dejó en claro que sabe jugar el juego del espectáculo tan bien como domina las rutas o lee las coberturas.

Su postura abierta respecto al reto físico y mental de jugar dos roles en la NFL ha sido celebrada por fans y figura una vez más con el sello de su exentrenador Deion Sanders:

“No hay duda de que Travis puede hacerlo. Yo lo intenté, pero Travis tiene otra mentalidad. Tiene algo que no muchos tienen: hambre ofensiva y mentalidad defensiva.”
—Deion Sanders para ESPN

Los efectos colaterales: lo que significa para el resto de la NFL

La llegada de Hunter no solo cambia el paradigma en Jacksonville. También vuelve a poner en el mapa una conversación latente sobre la versatilidad en la NFL moderna. ¿Se pueden volver comunes los jugadores "bidireccionales"? ¿Aumentará el valor de aquellos con múltiples habilidades en días de draft?

Franquicias tradicionales son reacias a estos movimientos, pero en una liga cada vez más cargada de innovación ofensiva y necesidad de talento instantáneo, Hunter puede ser el primer paso hacia una renovación estructural del scouting universitario, donde ahora, más que nunca, se valorará la polivalencia por encima de la especialización.

Dudas, desafíos y expectativas

A pesar del entusiasmo, esta apuesta viene con múltiples advertencias. Jugar ambos lados del balón conlleva un enorme desgaste físico. En la NCAA, Deion Sanders tenía la potestad de darle días de descanso a Hunter tras partidos extensos. En la NFL, donde los calendarios son brutales y el margen de error mínimo, eso podría no ser opción.

Además, la exigencia táctica de la NFL puede exponer a un jugador que no se especializa 100% en una sola faceta. ¿Podrá Hunter mantenerse saludable y efectivo durante una temporada de 17 partidos —más playoffs? Ese interrogante persiste, mientras las expectativas por verlo debutar crecen exponencialmente.

Entre la superstición y la revolución

En su intento por revolucionar lo establecido, Gladstone, Coen y Boselli han arriesgado capital de draft, imagen y expectativas. Pero en un equipo que no ha sido contendiente desde la fugaz aparición en la Final de Conferencia en 2017, tal vez era el momento indicado para apostar al talento generacional que representa Hunter.

Si Hunter logra mantenerse sano y productivo, no solo será una figura de impacto inmediato en Jacksonville, sino que podría convertirse en la prueba viviente de que el fútbol americano aún tiene espacio para la genialidad disruptiva.

Ya no se trata solo de si Travis Hunter será bueno. La verdadera pregunta es: ¿cuánto cambiará Travis Hunter el juego?

Este artículo fue redactado con información de Associated Press