Alemania en un nuevo rumbo: Friedrich Merz llega al poder con promesas, tensiones y viejos fantasmas

El veterano líder conservador será el décimo canciller de la era de posguerra de Alemania. Su ascenso, su lucha con Merkel y su visión sobre migración, economía y Europa marcan un giro potencial en la política alemana.

Por primera vez desde que Angela Merkel abandonó el escenario político en 2021, Alemania se encamina hacia un nuevo capítulo con Friedrich Merz, líder conservador de la Unión Demócrata Cristiana (CDU), quien ha logrado formar gobierno y será el décimo canciller desde la Segunda Guerra Mundial. Pero ¿quién es realmente Merz y qué representa su llegada al poder en uno de los países más influyentes de Europa?

Una victoria tardía pero contundente

Con 69 años, Friedrich Merz ha tenido una carrera política que se asemeja más a una montaña rusa que a una escalera recta hacia el éxito. Su Unión ganó las elecciones federales del 23 de febrero de 2025 con una mayoría convincente. Contra muchos pronósticos, Merz logró unir fuerzas con los socialdemócratas (SPD) para formar una coalición de gobierno, un giro interesante considerando que el SPD fue el partido del entonces canciller saliente Olaf Scholz.

Tras asumir el liderazgo del CDU en su tercer intento en 2022, Merz consolidó su posición al dirigir el grupo parlamentario de la Unión y mantener posturas firmes en temas de migración, defensa y economía. En palabras del biógrafo Volker Resing, autor de "Friedrich Merz: Su camino al poder":

“Merz probablemente será uno de los cancilleres más internacionales que ha tenido Alemania desde 1945”

Un pasado marcado por Angela Merkel

La historia política de Merz no puede contarse sin mencionar a la influyente figura de Angela Merkel. Ambos iniciaron sus carreras políticas al mismo tiempo, y aunque sus trayectorias convergieron más de una vez, también chocaron con fuerza.

En 2002, tras una derrota electoral, Merkel consolidó su control sobre la CDU y desplazó a Merz como líder del grupo parlamentario, una acción que Merz nunca perdonó del todo. En sus memorias, Merkel escribió:

“Éramos casi de la misma edad, pero nuestras formas de ver y de vivir eran tan distintas que la rivalidad fue casi inevitable. Ambos queríamos ser jefes”.

Como resultado, Merz abandonó la política activa en 2009, dedicándose al sector privado, incluyendo como presidente del consejo de vigilancia de BlackRock Alemania, lo que más tarde generaría controversia por presuntos conflictos de interés financieros.

Un regreso con agenda definida

Su retorno fulminante al escenario político comenzó tras la renuncia de Merkel a la presidencia del CDU en 2018. A pesar de dos derrotas en elecciones internas del partido, Merz se mantuvo y perseveró hasta convertirse en una de las figuras más influyentes de la política alemana actual.

Durante su campaña para las elecciones de 2025, prometió revitalizar la economía alemana, afectada por la pandemia, la guerra de Ucrania y las recientes tensiones con EE.UU. Además, se comprometió a reformar radicalmente las políticas migratorias, especialmente tras el ataque con arma blanca en Aschaffenburg que conmocionó al país.

Las polémicas que lo rodean

El discurso migratorio de Merz y su propuesta para endurecer las leyes fueron criticadas por muchos. Una moción presentada por su partido fue aprobada en el parlamento gracias a los votos del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD). Aunque Merz ha insistido en que “jamás trabajará con la AfD”, esta asociación indirecta le valió críticas tanto de colegas como de la ciudadanía.

Angela Merkel, firme opositora de toda coalición con la ultra derecha, también lo reprendió públicamente. Cientos de miles de ciudadanos salieron a las calles en distintas ciudades alemanas para protestar contra lo que perciben como una “normalización del extremismo”.

No obstante, Merz sostiene que “el debate real solo empieza con una buena dosis de provocación”, frase que resume su estilo directo y, muchas veces, divisivo.

Un piloto rural en el puesto más alto

Originario del Sauerland, una región alemana rural, Merz representa a su comunidad en el Bundestag. Con una familia de tres hijos y una esposa jueza, su vida refleja valores conservadores que refuerza en su discurso político.

Curiosamente, es también piloto aficionado. Durante años, pilotaba su pequeño avión privado desde Sauerland hasta Berlín cada semana:

“Por encima de las nubes está la libertad”, dijo alguna vez a su biógrafo.

Este hobby le ha traído ciertas críticas por ser considerado un “lujo de ricos”, pero también lo muestra como una figura que valora la independencia y el control, características que lo definen políticamente.

Prioridades: Europa, defensa y migración

El ascenso de Merz coincide con un momento geopolítico sumamente delicado. Con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y una guerra en Ucrania sin fin a la vista, Alemania, pieza clave de la arquitectura europea, necesita liderazgo firme pero equilibrado.

Merz ha prometido:

  • Impulsar una defensa europea común, incluyendo mayor gasto militar.
  • Reafirmar la alianza transatlántica con EE.UU., aunque matizando los roces actuales.
  • Liderar una respuesta común de la UE frente a China y Rusia.
  • Reestructurar la política migratoria con énfasis en control fronterizo y expulsiones rápidas.

Todo esto en un contexto en el cual la economía alemana ha mostrado signos de estancamiento, con un crecimiento del PIB de apenas 0,1% en 2024 y una inflación interanual de 5,3%.

¿Una nueva era para Alemania?

Friedrich Merz pasa a la historia moderna como uno de los políticos más persistentes de su generación. Su llegada a la cancillería es vista por muchos como el inicio de una era conservadora más directa, menos tecnocrática, y posiblemente más agresiva en política exterior.

Pero también es una señal de que, tras Merkel y Scholz, Alemania está dispuesta a buscar nuevos caminos dentro del liderazgo internacional, aunque esos caminos traigan consigo tensiones internas, protestas y desafíos sobre cómo equilibrar orden democrático, seguridad y apertura.

En palabras del propio Merz durante su discurso de victoria:

“Europa está en un punto de inflexión. Alemania liderará voces de unidad, libertad y responsabilidad.”

La historia dirá si es el piloto adecuado en medio de la tormenta que atraviesa el continente.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press