Julio Rodríguez levanta a los Mariners, mientras los problemas inician para Devers y los Red Sox
Una jornada emocionante en las Grandes Ligas donde los héroes y las dificultades se mezclan entre homers, récords negativos y caos climático
Julio Rodríguez brilló con un cuadrangular de 438 pies que dio la victoria a los Seattle Mariners frente a los Oakland Athletics. Mientras tanto, Rafael Devers escribió una página nada deseada en la historia de MLB al sumar 12 ponches en los primeros cuatro encuentros de la temporada, un récord indeseado que mancha el inicio de los Boston Red Sox.
El despertar ofensivo de los Mariners
La ofensiva de Seattle parecía dormida hasta que llegó su estrella. Los Mariners no habían logrado mover un corredor más allá de primera base antes de que Rodríguez se enfrentara por tercera vez al zurdo J.P. Sears. En cuenta favorable, y ante una afición expectante, el joven dominicano conectó un batazo descomunal que aterrizó en las gradas del jardín izquierdo, poniendo a su equipo arriba 2-1 en la sexta entrada.
“Ese jonrón cambió la energía del equipo y del público. Julio demostró por qué es el referente de esta franquicia”, comentó el manager Scott Servais tras el partido.
Estadística clave: Antes del batazo de Rodríguez, Sears había retirado a 16 de los últimos 18 bateadores de los Mariners. El batazo cambió el ritmo del juego por completo.
Dominio de Woo desde la lomita
El abridor Bryan Woo fue igual de protagonista. En seis entradas, permitió apenas tres imparables y una carrera —un cuadrangular solitario de Tyler Soderstrom—, además de recetar cinco ponches. El bullpen de Seattle también brilló: Gregory Santos, Trent Thornton y Andrés Muñoz cerraron el partido permitiendo solo un imparable en las tres últimas entradas.
Al final, el marcador de 2-1 selló no solo una victoria importante para los Mariners, sino también el empate 2-2 en la serie frente a su rival del Oeste de la Americana.
Rafael Devers y un inicio para el olvido
Mientras en Seattle celebraban, en Arlington, Texas el ambiente era otro. Rafael Devers, ahora designado oficial de los Red Sox, se convirtió en el primer jugador en la historia de la MLB en poncharse 12 veces en los primeros cuatro partidos de una temporada.
En la derrota 3-2 frente a los Texas Rangers, Devers se fue de 4-0 con dos ponches, sumando así a su cuenta negativa. La anterior marca eran 11 ponches y había sido igualada por Ronald Acuña Jr., Byron Buxton, Brent Rooker y Brett Wallace.
Dato histórico: Según Sportradar, ningún jugador en los 123 años previos había iniciado tan mal desde el plato en términos de ponches.
La presión sobre Devers
El dominicano vive un proceso de transformación dentro del equipo. La llegada de Alex Bregman desplazó a Devers de la tercera base al rol de designado. Esto ha añadido un enfoque aún mayor sobre su rendimiento ofensivo, ya que se espera que aporte poder como DH.
Pese a sus fallos, mostró disciplina al conseguir una base por bolas en la novena que puso al corredor del empate en posición de anotar. ¿Es este un primer paso hacia el ajuste que necesita?
“No hay dudas del talento de Devers, pero si no lo saca pronto, el ruido será ensordecedor en Boston”, opinó el analista Ken Rosenthal en un segmento de MLB Network.
Lluvia, caos y paciencia en Chicago
En otra parte del país, específicamente en Chicago, la naturaleza también se quiso sumar al espectáculo del béisbol. Durante el séptimo inning del encuentro entre los Angels y los White Sox, un aguacero repentino interrumpió el juego con el marcador empatado 2-2.
Una escena insólita se vivió cuando el personal de campo no logró desplegar completamente la lona, dejando áreas del infield expuestas. La tripulación tuvo que improvisar utilizando lonas más pequeñas y toneladas de material secante para rehabilitar el terreno.
Tras casi tres horas de retraso, el partido se reanudó, aunque con fuertes críticas a la logística del estadio. ¿Es esto un recordatorio de que algunas cosas, incluso en una liga de élite como la MLB, siguen dependiendo del ingenio humano ante la inclemencia del clima?
El valor estratégico de un cuadrangular oportuno
Volviendo al tema de Rodríguez, su jonrón no fue cualquier batazo. Fue una muestra del impacto que puede tener un solo swing cuando se combina talento, oportunidad y presión. Los Mariners se vieron dominados por J.P. Sears, quien apenas había cedido tres sencillos. Pero Rodríguez no solo salvó a su equipo, también reafirmó su estatus como uno de los jugadores más valiosos del joven talento latino en las Grandes Ligas.
Con tan solo 23 años, Julio ya fue Novato del Año en 2022, elegido All-Star y firmó una extensión de contrato a largo plazo con Seattle. Su cuadrangular frente a los Athletics recordó a muchos fanáticos por qué el club apostó su futuro a él.
¿Es sostenible una ofensiva centrada en Rodríguez?
La pregunta para Seattle es si pueden depender de forma continua del talento de Julio. Si bien su ofensiva fue silenciosa antes del jonrón, Rodríguez se encargó de desbloquearla. Sin embargo, es evidente que para competir de forma seria, necesitarán más consistencia desde la parte baja de su orden al bate.
Por ahora, los Mariners se mantienen competitivos en una división complicada, con los Astros y Rangers como contendientes de peso. Julio Rodríguez, por su parte, ya empieza a construir otra temporada de impacto.
Lo que viene
- Seattle Mariners: Enfrentarán a los Detroit Tigers con Emerson Hancock en la lomita, mientras que Detroit enviará a Jackson Jobe.
- Oakland Athletics: Regresan a casa para su apertura de temporada en Sutter Health Park contra los Cubs. Joey Estes abrirá por los A’s.
- Boston Red Sox: Buscarán respuestas urgentes en su orden ofensivo, mientras Devers trata de dejar atrás su nefasta marca inicial.
La temporada apenas comienza, pero las historias ya se están escribiendo en letras doradas... y algunas, desafortunadamente, en tinta roja.