La NBA conquista Europa: entre la expansión de la liga y el duelo Wembanyama vs. Doncic en el EuroBasket
La liga de baloncesto más potente del mundo intensifica sus planes para establecerse en el Viejo Continente mientras se anticipa un choque estelar en la EuroBasket 2025
¿Se imaginan una versión europea de la NBA? No hablamos solamente de partidos amistosos o partidos internacionales ocasionales, sino de una liga establecida, con equipos permanentes y una estructura profesional semejante a la NBA pero en suelo europeo. Esto, que hace décadas parecía una utopía, está cada vez más cerca de convertirse en realidad.
Este jueves, durante la reunión de la Junta de Gobernadores de la NBA en Nueva York, los propietarios de los equipos fueron puestos al día sobre un proceso que puede redefinir el mapa del baloncesto internacional: la posible expansión de operaciones oficiales de la NBA en Europa, en colaboración con FIBA, la entidad que regula el baloncesto a nivel global.
NBA Europa: un sueño en camino
Ya desde hace años, el comisionado de la NBA, Adam Silver, ha expresado su deseo de fortalecer los vínculos con el baloncesto europeo, e incluso de albergar una NBA Europe League, un torneo anual o permanente que conecte más directamente a los fans del Viejo Continente con la experiencia NBA. En su conferencia en París, en enero de este año, Silver declaró que la liga sigue "en camino" para materializar una presencia más estructurada en Europa.
“Estamos explorando diferentes formas de integrarnos mejor con el mercado europeo y crear algo sostenible y competitivo", dijo Silver. El proyecto cuenta también con la implicación de figuras clave de FIBA, como su secretario general Andreas Zagklis, quien ha participado activamente en las reuniones con la NBA.
¿Por qué Europa?
La expansión hacia Europa no es caprichosa. En primer lugar, Europa ha producido algunas de las mayores estrellas de la NBA en los últimos años: Luka Doncic (Eslovenia), Giannis Antetokounmpo (Grecia), Nikola Jokic (Serbia) y el flamante fenómeno de los San Antonio Spurs, Victor Wembanyama (Francia).
Además, el baloncesto europeo posee una enorme tradición, ligas consolidadas y una afición apasionada. Los eventos como la EuroLeague y los campeonatos internacionales (como el EuroBasket) atraen a millones de espectadores. Pero, a pesar de toda su historia, sigue habiendo margen de crecimiento, en especial por la falta de una marca mediática y de mercadeo como la NBA.
Unión NBA–FIBA: ¿complemento o competencia?
El mayor interrogante en relación con esta expansión es cómo se integrará con las ya existentes competencias europeas. ¿La NBA operará como una alternativa, o como una versión premium complementaria a la EuroLeague y demás torneos locales?
Desde la NBA han sido cuidadosos en destacar que el proyecto busca colaborar, no competir, con FIBA. De hecho, el acuerdo podría revivir la noción de una "Champions League" internacional definitiva de clubes, algo que los aficionados han soñado durante años. Un torneo de clubes intercontinental al estilo del Mundial de Clubes, pero de baloncesto.
Mientras tanto... EuroBasket 2025 calienta motores
A la par que se perfilan estos ambiciosos planes, Europa ya se prepara para disfrutar del gran torneo continental del próximo verano: el EuroBasket 2025, que se celebrará entre el 27 de agosto y el 14 de septiembre, con la fase final en Riga, Letonia.
Este jueves también se realizó el sorteo oficial de los grupos, y hay un emparejamiento que hizo saltar las alarmas: Francia y Eslovenia compartirán el Grupo D, lo que nos ofrece la posibilidad de ver un duelo colosal entre Victor Wembanyama y Luka Doncic.
¿Veremos a Wembanyama en el EuroBasket?
Todo dependerá de su recuperación. El novato sensación de los Spurs fue diagnosticado con trombosis venosa profunda en uno de sus hombros y ha sido descartado para el resto de la temporada NBA. Aunque los Spurs han sido herméticos respecto a su recuperación, no se descarta que esté disponible para el EuroBasket.
A nivel selección, Wembanyama ha mostrado siempre un gran compromiso con Francia. En declaraciones pasadas, aseguró que representar a su país era un orgullo. Aún así, no será una decisión sencilla. Con solo 20 años, su salud y su futuro a largo plazo serán factores cruciales.
En el otro extremo, Doncic —ahora jugando para los Lakers— ha confirmado su intención de representar a Eslovenia si se encuentra en condiciones físicas adecuadas. Esto aumenta la expectativa: podríamos estar ante uno de los duelos internacionales más atractivos del baloncesto reciente.
EuroBasket 2025: los grupos
El torneo presenta una configuración de cuatro grupos que se jugarán en distintas sedes:
- Grupo A (Riga, Letonia): Letonia, Serbia, República Checa, Turquía, Estonia, Portugal
- Grupo B (Tampere, Finlandia): Finlandia, Alemania, Lituania, Montenegro, Reino Unido, Suecia
- Grupo C (Limassol, Chipre): Chipre, España, Grecia, Italia, Georgia, Bosnia y Herzegovina
- Grupo D (Katowice, Polonia): Polonia, Francia, Eslovenia, Israel, Bélgica, Islandia
Los cuatro mejores equipos de cada grupo accederán a la fase final en Riga del 6 al 14 de septiembre. Si Francia y Eslovenia logran avanzar, podrían enfrentarse nuevamente en rondas más avanzadas, lo que incrementa el dramatismo y calidad del torneo.
Una nueva escena de poder en el baloncesto
La combinación de estos dos sucesos —una hipotética liga NBA en Europa y un EuroBasket con algunos de los mejores jugadores del mundo— no solo emociona a los aficionados, sino que subraya un cambio de paradigma en el baloncesto global.
La globalización del baloncesto ya no es futura: está ocurriendo ahora. Lo que antes eran visitas esporádicas o productos de televisión han dado paso a contratos, asociaciones estratégicas e incluso a la posibilidad de franquicias internacionales. Silver ha sido enfático en que no se trata de una "conquista" sino de una fusión cultural y deportiva.
Esta confluencia no sólo beneficia a la liga y los fans, sino también a los propios jugadores. Más torneos, mayor exposición, mejores condiciones y mayores incentivos pueden motivar a más jóvenes talentos europeos a mantenerse en sus ligas nativas, reforzando el deporte desde abajo.
Jordan Goodwin y el efecto dominó
De fondo, también se dan movimientos internos que apuntan a esta globalización. Los Lakers confirmaron recientemente la contratación del base Jordan Goodwin con un contrato estándar (no dual) por dos años, asegurando su presencia en los playoffs. Goodwin ha tenido un impacto notable desde que firmó un contrato dual, promediando 6.4 puntos, 3.9 rebotes y 1.4 asistencias por partido, con un 41.3% en triples.
Para hacer hueco, el equipo angeleno se deshizo de Cam Reddish, quien había sido reincorporado tras frustrarse su traspaso a Charlotte. El cambio confirma cómo las rotaciones se adaptan a nuevas prioridades competitivas, y nuevamente señala la versatilidad de los jugadores formados en diferentes ligas o contextos.
¿Y ahora qué?
Mientras el sueño de la NBA en Europa toma forma con paso firme, los aficionados tienen motivos de sobra para ilusionarse: un torneo continental con potenciales enfrentamientos estelares, más jugadores europeos brillando en la NBA y una cooperación que puede llevar al baloncesto a una nueva era internacional.
Si todo avanza como plantea la NBA, en unos años la pregunta ya no será si la liga puede cruzar el Atlántico, sino cómo será vivir una temporada regular en Praga, Múnich o París como parte de una futura NBA Europa.