El niño japonés que atrapó la pelota jonronera de Shohei Ohtani: una historia para recordar
Un afortunado fanático de 10 años convirtió una noche común en el Tokyo Dome en un recuerdo inolvidable gracias a la generosidad de Pete Crow-Armstrong.
Un momento mágico en el Tokyo Dome
El béisbol está lleno de historias memorables, pero pocas son tan entrañables como la de Sota Fujimori, un niño de 10 años de Saitama, Japón, cuya pasión por el béisbol lo llevó a vivir un momento inolvidable en el Tokyo Dome.
El pasado miércoles, durante el partido entre los Los Angeles Dodgers y los Chicago Cubs, Shohei Ohtani conectó un jonrón. La bola cayó cerca de Sota, quien en un principio creyó haber perdido la oportunidad de atraparla cuando un fanático cercano la dejó caer de vuelta al campo.
El gesto de Crow-Armstrong y la sorpresa de Sota
Cuando los árbitros revisaban la jugada para confirmar el jonrón, el jardinero central de los Cubs, Pete Crow-Armstrong, lanzó la pelota de Ohtani de nuevo a las gradas, dándole a Sota una segunda oportunidad. Esta vez, el joven aficionado no falló y se convirtió en el dueño de un tesoro invaluable.
“Al principio pensé que la había perdido”, contó Sota en una breve entrevista con medios locales. Sin embargo, su suerte cambió y terminó sosteniendo la bola que representa el primer cuadrangular de la temporada de Ohtani con los Dodgers.
Ohtani en su regreso a Japón
Para Shohei Ohtani, el partido también fue especial. El japonés volvió a jugar en su país natal y brindó una actuación destacada que llevó a los Dodgers a la victoria 6-3 sobre los Cubs.
Tras esta serie inaugural en Tokyo, los Dodgers demostraron que su ofensiva será un peligro constante durante la temporada de las Grandes Ligas. Ohtani, por su parte, deleitó a los fanáticos japoneses que acudieron a verlo en vivo.
Un recuerdo para la eternidad
Vestido con una camiseta azul de los Dodgers y un guante en su mano derecha, Sota mostró con orgullo la bola que atrapó. “Voy a guardarla como el tesoro de la familia”, afirmó emocionado.
Su historia es una de esas que hacen del béisbol un deporte mágico, en el que un simple aficionado puede convertirse en parte de la historia, especialmente cuando los protagonistas del juego ayudan a que momentos así sucedan.