Cuba en la Oscuridad: Crisis Energética y el Futuro de la Electricidad en la Isla
Los apagones masivos en Cuba reflejan una crisis energética y económica sin precedentes. ¿Cuál es el futuro del sistema eléctrico cubano?
Un país en la oscuridad
En la noche del viernes, Cuba se sumió en la oscuridad total. Un fallo en una subestación de La Habana dejó sin electricidad a toda la isla por más de 36 horas. Este incidente, el cuarto en los últimos seis meses, pone de manifiesto las profundas deficiencias del sistema eléctrico cubano, afectado por una crisis económica severa y por una infraestructura obsoleta.
El impacto de los apagones
Más allá de la incomodidad de quedarse sin luz, los cortes de electricidad han generado problemas más graves. La interrupción de servicios de telefonía, internet y suministro de agua han puesto en apuros a la población. Además, muchos cubanos no pudieron cocinar debido a su dependencia de electrodomésticos para la preparación de alimentos.
La crisis no es nueva. En los últimos meses, apagones similares han afectado sistemáticamente el país en octubre, noviembre y diciembre. En febrero de 2025, el gobierno incluso llegó a suspender clases y actividades laborales durante dos días debido a la falta de generación eléctrica, que superaba el 50% del consumo nacional.
¿Por qué Cuba se queda sin luz?
- Infraestructura obsoleta: La mayoría de las plantas energéticas de Cuba llevan más de 30 años en funcionamiento, lo que las hace propensas a fallos frecuentes.
- Falta de combustible: Debido a la escasez de divisas y a las sanciones económicas de EE.UU., la isla enfrenta dificultades para importar combustible.
- Mantenimiento deficiente: Muchas plantas de generación no reciben el mantenimiento adecuado, lo que incrementa el riesgo de colapsos.
A esta crisis se suma la creciente demanda de electricidad, especialmente durante los meses más calurosos del verano tropical.
Soluciones del gobierno
Ante esta problemática, el gobierno cubano ha implementado medidas paliativas. Entre ellas, se han alquilado plantas flotantes de generación de electricidad provenientes de Turquía. Estas embarcaciones han ayudado a reducir los efectos de los apagones, pero representan un gasto elevado y solo proporcionan una solución temporal.
Por otro lado, el gobierno prometió que en 2025 comenzarán a operar varios parques solares para diversificar la matriz energética del país. Sin embargo, expertos consideran que esta medida es insuficiente si no se moderniza la infraestructura eléctrica existente.
La crisis energética y el futuro de Cuba
El contexto en el que se desarrollan estos apagones es alarmante. La crisis económica cubana se ha visto agravada en los últimos años debido a:
- Los efectos de la pandemia de COVID-19.
- Medidas económicas locales que han disparado la inflación.
- El endurecimiento de las sanciones por parte de los Estados Unidos, lo que ha limitado el acceso a recursos estratégicos.
A la par, el creciente descontento social se ha manifestado en protestas y en un agravamiento del éxodo migratorio. Sin mejoras sustanciales en el sistema eléctrico y económico, la situación solo podría empeorar.
Mientras tanto, los cubanos siguen enfrentando la incertidumbre de cuándo será el próximo apagón masivo y cómo afectará sus vidas diarias.
