Robert F. Kennedy Jr. y su polémica postura sobre las vacunas
El secretario de Salud de EE. UU. ha generado controversia con su escepticismo hacia las vacunas y su enfoque en la alimentación saludable.
Un inicio turbulento en el Departamento de Salud
Desde que asumió el cargo como Secretario de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, Robert F. Kennedy Jr. ha estado rodeado de controversia. Conocido por sus opiniones controvertidas sobre las vacunas, su primer mes en el puesto ha estado marcado por decisiones que han avivado la preocupación entre los expertos en salud pública.
En su primera intervención ante trabajadores de agencias de salud pública como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), Kennedy prometió investigar el calendario de vacunación infantil. Poco después, varias reuniones clave sobre vacunas fueron canceladas sin ser reprogramadas hasta la fecha.
Cancelaciones y cuestionamientos
Uno de los principales motivos de alarma provino de la cancelación de un encuentro del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización de los CDC, un grupo de expertos encargado de hacer recomendaciones sobre vacunas. De igual manera, la FDA no ha reprogramado su reunión anual sobre la vacuna contra la gripe, una cita que llevaba más de 30 años realizándose sin interrupción.
“Lo que está perdiéndose aquí es la transparencia,” expresó el senador y médico Bill Cassidy, que preside el comité de salud del Senado. La falta de comunicación sobre estas decisiones ha generado intranquilidad respecto a la disponibilidad y recomendación de vacunas en el futuro.
Mensajes contradictorios sobre la vacunación
Si bien Kennedy ha declarado públicamente que no es “antivacunas” y que apoya el calendario de vacunación infantil, sus declaraciones han generado confusión. En entrevistas recientes, ha enfatizado que las vacunas pueden causar muertes, aunque luego añadió que deberían promoverse. Este tipo de mensajes mixtos han sido duramente criticados por expertos en enfermedades infecciosas.
“Este tipo de declaraciones generan miedo infundado sobre la seguridad de las vacunas,” indicó el Dr. Paul Offit, experto en enfermedades infecciosas del Hospital Infantil de Filadelfia. “Kennedy siempre ha intentado reducir la disponibilidad de las vacunas, y ahora tiene una plataforma desde el gobierno para hacerlo.”
Respuesta a brotes de sarampión
Recientemente, EE.UU. ha experimentado un aumento en casos de sarampión, con brotes en Texas y Nuevo México. En lugar de enfatizar la vacunación como la solución primordial, Kennedy ha promovido el uso de la Vitamina A como tratamiento. Si bien la Vitamina A puede ayudar a reducir la severidad de la enfermedad en ciertos casos, los expertos subrayan que no es un método preventivo.
“La única forma de detener un brote es con mensajes de vacunación claros y coordinados,” explicó la Dra. Susan Kressly, pediatra. “Sin una recomendación firme, los padres quedan confundidos y dudan de vacunar a sus hijos.”
Impulso a la alimentación saludable
Más allá de la polémica sobre vacunas, Kennedy ha puesto el foco en la alimentación saludable. Ha sido un ferviente defensor de eliminar ciertos aceites de cocina en la industria de la comida rápida y recientemente elogió a la cadena Steak ’n Shake por cocinar sus papas fritas en sebo de res en lugar de aceites vegetales comunes.
Asimismo, ha promovido iniciativas para reducir el consumo de refrescos entre beneficiarios del Programa de Asistencia de Nutrición Suplementaria (SNAP). Algunos legisladores en Texas y Utah han comenzado a presentar proyectos de ley para prohibir el uso de estos beneficios en la compra de sodas.
¿Hacia dónde va su gestión?
Si bien la lucha por establecer hábitos alimenticios más saludables es una causa relevante, el enfoque ambiguo de Kennedy con respecto a las vacunas está generando desconfianza entre el público y los expertos médicos. En un contexto global donde brotes de enfermedades prevenibles han resurgido debido a la disminución de tasas de vacunación, su liderazgo sigue dividido entre la promoción de la salud y el escepticismo hacia medidas científicamente comprobadas.
Las próximas decisiones de Kennedy en materia de salud pública serán críticas para determinar si su mandato reforzará o socavará la confianza en el sistema de inmunización en el país.
