Milagro en Pensilvania: Cinco Sobrevivientes en Accidente Aéreo
Un avión se estrella en el estacionamiento de una comunidad de retiro y milagrosamente todos sobreviven
El pasado domingo, un avión monomotor con cinco ocupantes a bordo se estrelló y estalló en llamas en el estacionamiento de una comunidad de retiro en las afueras de Lancaster, Pensilvania. Lo que parecía ser una tragedia inevitable terminó en un sorprendente milagro: todos los ocupantes sobrevivieron al impacto.
Un accidente que pudo ser catastrófico
El jefe de la policía del municipio de Manheim, Duane Fisher, informó que el accidente ocurrió alrededor de las 3 p.m., a escasa distancia del Aeropuerto de Lancaster. Sin embargo, aún se desconoce la condición de los cinco heridos, quienes fueron trasladados de inmediato a hospitales cercanos. Afortunadamente, no hubo personas en tierra afectadas.
Brian Pipkin, un testigo presencial del suceso, describió el dramático momento en el que el avión perdió el control y se precipitó al suelo. “Vi que el avión subía, pero de repente giró bruscamente a la izquierda y luego cayó de nariz. Inmediatamente hubo una bola de fuego”, relató Pipkin.
Una rápida respuesta de emergencia
Al ver la magnitud del accidente, Pipkin llamó al 911 y se dirigió al lugar de los hechos, donde grabó espesas columnas de humo negro elevándose desde los restos del avión y varios vehículos en llamas dentro del estacionamiento de Brethren Village, un complejo residencial para jubilados. El testigo indicó que la aeronave estuvo a punto de chocar contra un edificio de tres pisos en la comunidad.
Gracias a la rápida movilización de los servicios de emergencia, un camión de bomberos del aeropuerto llegó en cuestión de minutos y más refuerzos se unieron poco después para sofocar las llamas y rescatar a los sobrevivientes.
Investigación en curso
La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que el avión siniestrado era un Beechcraft Bonanza, un modelo monomotor de alto rendimiento. Hasta el momento, no se ha divulgado su ruta de vuelo o destino, ni la causa exacta del accidente.
Uno de los datos más llamativos proviene del audio de comunicación con la torre de control, donde el piloto reportó una puerta abierta en la aeronave y solicitó regresar al aeropuerto para un aterrizaje de emergencia. En la grabación se escucha cómo el controlador aéreo le otorga el permiso para aterrizar, seguido de un grito de advertencia: “¡Sube!”. Momentos después se confirmaba la caída del avión en el estacionamiento.
Un precedente inquietante
La caída de esta aeronave ocurre apenas un mes después de otro trágico incidente aéreo en Filadelfia, donde una ambulancia aérea se estrelló en una calle concurrida, causando la muerte de siete personas.
Aunque el accidente en Pensilvania tuvo un desenlace menos trágico, sigue despertando preocupaciones sobre la seguridad en vuelos de pequeña escala. Las investigaciones de la FAA serán clave para determinar si el fallo del avión se debió a error humano, falla mecánica u otro factor externo.
La comunidad en shock
Los residentes de Brethren Village, la comunidad de retiro donde ocurrió el impacto, fueron temporalmente instruidos a permanecer dentro de sus hogares por precaución. Entre los daños materiales figuran al menos doce automóviles incendiados en el estacionamiento.
El jefe de policía Fisher expresó su asombro ante la supervivencia de los cinco ocupantes del avión: “No sé si llamarlo un milagro, pero lo cierto es que tener un accidente aéreo en el que todos sobreviven y nadie en tierra resulta herido es algo maravilloso”.
La historia de este accidente aéreo en Pensilvania es prueba de que, aunque los desastres pueden ocurrir en cualquier momento, a veces la suerte y la intervención precisa de los servicios de emergencia pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
