El drama de las lesiones en la NBA: Los Mavericks sufren una plaga de bajas
Dallas enfrenta un escenario crítico con múltiples jugadores lesionados y pocas opciones para mantenerse en la pelea en la Conferencia Oeste
Un equipo diezmado hasta el límite
La temporada 2024-25 de la NBA ha sido una prueba de resistencia para muchos equipos, pero pocos han sufrido tan intensamente como los Dallas Mavericks. Entre lesiones devastadoras y una plantilla diezmada, la franquicia tejana se encuentra en una situación crítica que hace peligrar su permanencia en la lucha por los playoffs.
El último golpe llegó en la derrota 125-116 ante los Phoenix Suns, donde los Mavericks terminaron el partido con solo siete jugadores disponibles. La noche se vio marcada por un aterrador choque de cabezas entre Dwight Powell y Kessler Edwards, lo que dejó a ambos jugadores con heridas que requirieron puntos de sutura. Powell no pudo regresar al partido, y Edwards jugó con un vendaje en el ojo.
Irving y Davis fuera, ¿y ahora qué?
La situación ya era crítica antes del encuentro contra Phoenix. Kyrie Irving sufrió una lesión de rodilla que puso fin a su temporada, mientras que Anthony Davis, quien debutó recientemente con los Mavericks tras un traspaso impactante que entregó a Luka Doncic a los Lakers, también está fuera sin un tiempo estimado de regreso por una lesión en la ingle.
Jason Kidd, entrenador del equipo, ha tenido que manejar un rompecabezas imposible. “Estamos tratando de averiguar cómo jugar con lo que tenemos”, dijo Kidd después del partido. “Es una situación difícil”.
La lucha por los puestos de Play-In
Los Mavericks, actuales décimos en la Conferencia Oeste, están en una batalla por asegurar el último boleto al torneo Play-In. No solo Phoenix, sino varios equipos como Sacramento y Golden State acechan esperando cualquier tropiezo de Dallas.
Con una lista de lesionados que también incluye a Daniel Gafford (rodilla), Dereck Lively II (tobillo), Olivier-Maxence Prosper (muñeca) y más nombres, la pregunta es si los Mavericks podrán sobrevivir lo suficiente como para mantener su posición en la tabla.
El sacrificio de los jugadores disponibles
Naji Marshall, una de las piezas claves en este momento crítico, tuvo que jugar más de 40 minutos por primera vez en su carrera, anotando 34 puntos en la derrota ante los Suns. “Esto es parte del trabajo”, dijo Marshall. “Nos contrataron para estar listos cuando se necesite”.
Mientras los Mavericks afrontan la posibilidad de jugar su próximo partido en San Antonio con solo siete u ocho jugadores saludables, la presión sobre los que aún pueden jugar es enorme. Entre restricciones de minutos para jugadores con molestias y una agenda implacable, el equipo de Kidd se encuentra en una verdadera carrera de resistencia.
La ironía de la situación
Kevin Durant, estrella de los Suns, manifestó su preocupación por lo que están atravesando los Mavericks: “Es una de las primeras veces que veo una situación así donde los jugadores realmente están lesionados y no se trata de tanking. Es triste ver a tantos fuera”, comentó Durant.
Ante la evidente desesperación, se le preguntó en tono de broma a Jason Kidd si él y el asistente Jared Dudley podrían regresar como refuerzos de emergencia. Kidd, entre risas, descartó la opción: “No podemos hacer eso. Nos cuesta demasiado. Hay que reírse o esto te volverá loco”.
¿Esperanza en el horizonte?
La pregunta para los Mavericks es si podrán resistir lo suficiente hasta que algunas de sus piezas clave regresen. Con un mes de temporada regular restante, cualquier pérdida significativa de partidos podría dejarlos fuera de los playoffs, en lo que sería un colapso inesperado para un equipo que llegó a las Finales de la Conferencia Oeste la campaña pasada.
¿Podrá Jason Kidd encontrar una solución con los pocos recursos que le quedan? ¿O será la adversidad demasiado grande para superar? Lo cierto es que, cualquiera que sea el desenlace, Dallas está viviendo una de las temporadas más difíciles de su historia reciente.
