Elecciones en Rumania: el polémico regreso de Calin Georgescu
Entre acusaciones de interferencia rusa y una posible inhabilitación, el populista de extrema derecha intenta recuperar su candidatura
El regreso de Georgescu al escenario político
Calin Georgescu, el político populista de extrema derecha, ha vuelto a sacudir la política rumana al presentar nuevamente su candidatura en la repetición de las elecciones presidenciales, luego de que el Tribunal Constitucional anulara su sorprendente victoria en la primera vuelta.
El pasado viernes, Georgescu llegó al Buró Electoral Central en Bucarest rodeado de cientos de seguidores que agitaban banderas rumanas y proclamaban su apoyo. Para muchos, su campaña representa una lucha contra lo que consideran una élite corrupta y manipuladora.
¿Por qué se anularon las elecciones?
En diciembre de 2024, el Tribunal Constitucional de Rumania tomó la decisión extrema de anular la primera vuelta de las elecciones, argumentando que se habían registrado importantes irregularidades y que existía evidencia de interferencia extranjera. Específicamente, se acusó a Rusia de ejecutar una campaña digital coordinada para favorecer a Georgescu, quien hasta entonces se mantenía con una baja intención de voto y sin reportes de gastos de campaña significativos.
Aunque Moscú negó categóricamente cualquier implicación en el proceso electoral rumano, la polémica persiste. Georgescu, por su parte, calificó la invalidación de la elección como un ‘golpe oficializado’ y una amenaza contra la democracia.
Investigaciones y desafíos legales
Pero su regreso no está exento de obstáculos. Actualmente, Georgescu enfrenta una investigación criminal bajo cargos de incitación contra el orden constitucional, apoyo a grupos fascistas y declaraciones falsas en relación con el financiamiento de su campaña.
Con un discurso vehemente en defensa de la soberanía nacional, el candidato ha intentado minimizar las acusaciones, asegurando que son intentos de silenciar la voz del pueblo rumano.
El contexto político en Rumania
El caso de Georgescu ha exacerbado las tensiones políticas en el país. La anulación de las elecciones fue seguida por protestas masivas en las calles, principalmente organizadas por grupos afines al candidato, quienes acusan a las instituciones estatales de ser instrumentos de manipulación de la Unión Europea y Occidente.
Figuras influyentes, como el vicepresidente de EE.UU., JD Vance, y el multimillonario Elon Musk, han expresado públicamente su apoyo a Georgescu, alimentando la percepción de que existen actores internacionales interesados en su candidatura.
Lo que sigue en el proceso electoral
El 4 de mayo de 2025 se llevará a cabo la repetición de la primera vuelta electoral. En caso de que ningún candidato logre superar el 50% de los votos, la segunda vuelta se celebrará el 18 de mayo. Aún no está claro si Georgescu podrá participar formalmente, ya que el Buró Electoral Central tiene hasta el 17 de marzo para aprobar o rechazar candidaturas.
La decisión, sin duda, será un punto de inflexión en el rumbo político de Rumania, un país donde el auge del populismo y la desconfianza en las instituciones continúan en aumento.