China refuerza su poderío militar con un aumento en su presupuesto de defensa

China apuesta por una expansión militar constante

China anunció un aumento del 7.2% en su presupuesto de defensa para 2025, alcanzando aproximadamente los 245 mil millones de dólares. Este incremento, revelado durante el Congreso Nacional del Pueblo, responde a los esfuerzos del país por modernizar y expandir su ejército, consolidando su influencia en la región de Asia-Pacífico. El gasto militar chino sigue siendo el segundo más alto del mundo, solo detrás del de Estados Unidos. Además, diversas estimaciones del Pentágono sugieren que el gasto real de China podría ser hasta un 40% mayor debido a partidas ocultas en otros presupuestos.

Una modernización estratégica

La inversión china ha permitido a las Fuerzas Armadas del país contar con la marina más grande del mundo y una creciente flota de aviones de combate de última generación. Entre las adquisiciones destacan cazas furtivos, portaaviones e innovaciones en tecnología de misiles y armas nucleares. Los expertos señalan que el principal foco de esta expansión es la capacidad de proyectar un mayor poder militar sobre sus zonas en disputa, como Taiwán y el Mar de China Meridional, donde Beijing ha construido bases militares en islas artificiales.

El factor Taiwán y la respuesta de Occidente

Uno de los temas clave en la estrategia militar china sigue siendo Taiwán, una isla autogobernada cuya soberanía Beijing se niega a reconocer. Recientemente, China reforzó sus maniobras militares en la zona con frecuentes incursiones de aviones y buques de guerra, acciones que buscan desgastar las defensas taiwanesas. En respuesta, Taipéi ha fortalecido su sistema de defensa con la adquisición de tanques, misiles y aviones F-16 modernizados proporcionados por Estados Unidos. Washington mantiene su apoyo a Taiwán con frecuentes envíos de armas y misiones de patrullaje en el estrecho entre la isla y China continental.

Implicaciones económicas y geopolíticas

El incremento del gasto militar chino no solo tiene repercusiones regionales, sino también a nivel global. La tensión en Asia-Pacífico ha llevado a naciones como Japón y Corea del Sur a reforzar sus propios presupuestos de defensa, incrementando el gasto en sistemas de misiles y en cooperación militar con EE.UU. Además, el anuncio del incremento presupuestario se produce en el contexto de una economía china en desaceleración, con una previsión de crecimiento en torno al 5% para el año. Aun así, el gobierno ha indicado que mantendrá su política de inversiones en tecnología y modernización militar como pilares fundamentales de su estrategia de desarrollo.

El futuro del equilibrio militar en Asia

La carrera armamentista en Asia parece estar lejos de aminorar su ritmo. Con Estados Unidos reforzando su presencia en la región y socios estratégicos como Japón, India y Australia alineándose para contener el avance chino, el escenario geopolítico continuará siendo volátil. Habrá que seguir de cerca cómo evolucionan las relaciones entre China y sus vecinos, y si este impulso en su gasto militar conlleva a futuras escaladas de tensión o si, por el contrario, propicia nuevas dinámicas de negociación y diplomacia en la región.