El futuro incierto del parole humanitario en EE.UU.: ¿Un ataque a la inmigración legal?
Miles de inmigrantes y ciudadanos estadounidenses están demandando a la administración Trump por eliminar un programa clave de ayuda humanitaria.
El parole humanitario: un salvavidas en peligro
Desde 1952, el gobierno de los Estados Unidos ha utilizado la figura del parole humanitario como una herramienta para permitir a personas de países en guerra o en crisis política ingresar al país temporalmente. Con el paso de los años, tanto presidentes republicanos como demócratas han recurrido a esta medida para atender emergencias humanitarias.
Sin embargo, la administración de Donald Trump ha eliminado este programa, lo que ha generado una ola de demandas por parte de inmigrantes y ciudadanos que han servido como patrocinadores de miles de personas afectadas por conflictos en países como Ucrania, Afganistán, Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela. Según estimaciones, más de 875,000 personas han sido aceptadas bajo este sistema de patrocinio humanitario.
Ciudadanos estadounidenses toman acción
Un grupo de ciudadanos estadounidenses y organizaciones presentó una demanda federal contra la administración Trump con el objetivo de revertir la cancelación del parole humanitario. Uno de los demandantes es Kyle Varner, un médico que ha patrocinado a 79 venezolanos ayudándolos a integrarse en la sociedad estadounidense.
"Siguieron las reglas. Han trabajado duro y han hecho todo lo posible por salir adelante. Eliminar el parole es una grave injusticia" – Kyle Varner
Al igual que Varner, otros patrocinadores como Sandra McAnany, una residente de Wisconsin, ayudaron a migrantes a encontrar vivienda, conseguir empleo e insertarse en la comunidad. La eliminación del programa ha dejado en el limbo muchas solicitudes aún pendientes, afectando tanto a migrantes como a sus patrocinadores.
El impacto en los beneficiarios
El parole humanitario ha sido una oportunidad para miles de personas que escapan de situaciones de violencia y persecución. Entre ellos encontramos casos como:
- Maksym y Maria Doe, una pareja ucraniana que huyó de la guerra.
- Alejandro Doe, un migrante nicaragüense que vio a su padre ser secuestrado y torturado.
- Omar Doe, quien trabajó con el ejército estadounidense en Afganistán durante más de 18 años.
Con la cancelación del programa, muchos de estos inmigrantes han quedado atrapados en un limbo legal, sin poder ajustar su estatus migratorio ni acceder a alternativas para establecerse de manera definitiva en los EE.UU.
Historia y controversia del parole humanitario
El parole humanitario nació con la Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952, permitiendo la entrada de personas bajo "razones humanitarias urgentes o beneficios públicos significativos". Ha sido utilizado en varias crisis migratorias, incluyendo la llegada de refugiados cubanos en la década de 1960, vietnamitas en los 70 y los recientes programas para afganos tras la retirada de EE.UU. de Afganistán en 2021.
El expresidente Joe Biden hizo un uso extenso del parole para controlar la llegada de migrantes a través de programas como el CBP One App. No obstante, Donald Trump argumenta que este programa ha sido utilizado de manera "abusiva y descontrolada", razón por la que decidió ponerle fin.
Reacciones y efectos colaterales
Mientras organismos de derechos humanos denuncian la cancelación como un ataque contra la inmigración legal, la administración Trump se mantiene firme, defendiendo la medida como parte de su política para reducir la inmigración indocumentada. La eliminación del parole pone en riesgo la reunificación de familias, dejando a muchos migrantes sin opciones para conseguir estabilidad en el país.
Esther Sung, abogada de la organización Justice Action Center, afirma que el objetivo central de la demanda es defender el parole humanitario como herramienta legal. Según ella, estos programas han demostrado ser exitosos tanto para los inmigrantes como para la economía del país.
"La administración Trump está atacando el parole desde todos los ángulos. Pero nuestra prioridad es defender estos procesos que han sido fundamentales para la protección de miles de personas" – Esther Sung
¿Qué sigue ahora?
La demanda presentada en Massachusetts aún debe pasar por varias etapas legales, pero es un reflejo del creciente conflicto entre políticas migratorias rigurosas y la necesidad de amparar a quienes huyen de la violencia.
Mientras tanto, miles de patrocinadores y migrantes esperan una resolución que les conceda una segunda oportunidad de estabilidad en los Estados Unidos.