El conflicto del Sahara Occidental llega al fútbol: La polémica camiseta del RS Berkane

El Tribunal de Arbitraje Deportivo dictamina que incluir el Sahara Occidental en el mapa de Marruecos en camisetas de fútbol es propaganda política.

El fútbol como escenario de disputas políticas

El fútbol es mucho más que un simple deporte; a menudo, se convierte en un campo de batalla simbólico donde se reflejan tensiones políticas y diplomáticas. Este ha sido el caso de la más reciente controversia entre Marruecos y Argelia, desatada por la inclusión del mapa del país norteafricano en las camisetas del Renaissance Sportive de Berkane (RS Berkane), que también mostraba el territorio del disputado Sahara Occidental. La disputa llegó hasta el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que falló en contra del club marroquí al aplicar las normativas que prohíben mensajes políticos en la indumentaria deportiva. ¿Por qué este símbolo ha causado tanta controversia? Sumérgete en este análisis de una rivalidad que va más allá del terreno de juego.

El Sahara Occidental: una región en disputa

El Sahara Occidental es una vasta zona rica en recursos naturales que ha sido objeto de disputas desde la retirada de España en 1975. Marruecos considera el territorio como parte de su soberanía, mientras que el Frente Polisario, respaldado por Argelia, lucha por su independencia y el reconocimiento internacional de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD). A pesar de que la ONU ha tratado de mediar en el conflicto desde aquel año, el referéndum de autodeterminación, prometido en 1991 tras un alto al fuego, nunca se ha llevado a cabo debido a discordancias sobre quiénes deberían tener derecho a votar. La relación entre Marruecos y Argelia se ha deteriorado significativamente en los últimos años, culminando en el corte de relaciones diplomáticas en 2021.

Las reglas del fútbol y la sanción del TAS

La FIFA y la Confederación Africana de Fútbol (CAF) son claras en su reglamentación: las camisetas de los equipos no deben incluir ningún mensaje de carácter político. Sin embargo, RS Berkane decidió incluir un mapa de Marruecos que incorporaba al Sahara Occidental en sus camisetas, lo que Argelia interpretó como una provocación y una reivindicación política implícita. La situación escaló el año pasado cuando las autoridades argelinas confiscaron los uniformes de RS Berkane antes de un partido de semifinales contra USM Alger. Ante la negativa del equipo marroquí a utilizar camisetas alternativas, el partido no se disputó y posteriormente, el equipo argelino tampoco quiso jugar el partido de vuelta en Marruecos. La CAF otorgó la victoria administrativa a RS Berkane. Finalmente, el TAS falló a favor de la apelación de la Federación Argelina de Fútbol, considerando que la inclusión del mapa infringía las normas contra mensajes de carácter político. La decisión establece un precedente en torneos internacionales y subraya la importancia de mantener la neutralidad en la indumentaria deportiva.

Marruecos y su creciente influencia en el fútbol africano

Este fallo ocurre en un momento clave para Marruecos, cuya influencia en el fútbol africano está en plena expansión. El país será sede de la Copa Africana de Naciones y participará como coanfitrión del Mundial de 2030 junto con España y Portugal. Además, el presidente de la Federación Marroquí de Fútbol, Fouzi Lekjaa, es un actor influyente en la CAF y la FIFA, factores que han reforzado al país en la arena futbolística continental. La presencia de Marruecos en la política deportiva se refleja en eventos como la inauguración de una oficina de desarrollo del fútbol africano en Rabat, lo que refuerza su peso en decisiones estratégicas del deporte en la región.

El trasfondo: deporte, política y diplomacia

El caso del RS Berkane es solo el más reciente capítulo de una larga lista de roces entre Marruecos y Argelia en el ámbito deportivo. En años recientes, ambos países han discutido no solo sobre fútbol, sino también sobre elementos culturales como caftanes, mosaicos e incluso el espacio aéreo. La rivalidad futbolística entre ambos países es, por lo tanto, un reflejo de una disputa geopolítica mucho más amplia. Este incidente destaca hasta qué punto el fútbol puede ser manipulado como herramienta política. La decisión del TAS establece un mensaje claro: el deporte no debe ser instrumentalizado para propósitos políticos o territoriales. Sin embargo, con la Copa Africana de Naciones a la vuelta de la esquina y la influencia creciente de Marruecos en la CAF, la tensión entre estos dos países parece lejos de resolverse. ¿Veremos más disputas en el futuro relacionadas con el fútbol y la política en África? Todo apunta a que este incidente será solo un episodio más en una larga saga de conflictos que traspasan las fronteras del deporte.
Este artículo fue redactado con información de Associated Press