Los Birkenstocks no son arte: el fallo del Tribunal Federal Alemán
La icónica sandalia alemana pierde su batalla legal para ser considerada una obra de arte protegida por derechos de autor.
El debate sobre el diseño y la funcionalidad
Los Birkenstocks han sido una pieza clave en el calzado veraniego durante décadas. Comodidad, diseño atemporal y una herencia alemana centenaria han convertido a estas sandalias en un ícono global. Sin embargo, la empresa Birkenstock intentó dar un paso más allá argumentando que sus modelos debían ser considerados «obras de arte aplicadas» y, por lo tanto, protegidos bajo la ley de derechos de autor de Alemania.
Pero la justicia alemana no estuvo de acuerdo. El Tribunal Federal de Justicia desestimó la demanda de Birkenstock contra tres compañías que vendían modelos similares, estableciendo que las icónicas sandalias no cumplen con los requisitos de originalidad exigidos para una obra de arte protegida. Esta decisión pone de manifiesto la delgada línea entre diseño de producto y expresión artística.
Birkenstock: una marca con historia
Con raíces que se remontan a 1774, Birkenstock ha construido una identidad basada en la calidad y la ergonomía. Sus sandalias han sido adoptadas por distintas generaciones, desde hippies en los años 60 hasta celebridades y diseñadores de moda en la actualidad. La compañía, con sede en Linz am Rhein, ha sido un referente de la artesanía y la funcionalidad del calzado.
Más allá de su éxito comercial, Birkenstock intentó obtener una protección adicional para su diseño a través del derecho de autor. Este tipo de reconocimiento legal habría limitado la proliferación de imitaciones, otorgándole a la marca un nivel de exclusividad similar al de los productos de lujo.
El fallo del Tribunal Federal Alemán
El caso pasó por distintos niveles judiciales en Alemania. Inicialmente, un tribunal regional de Colonia favoreció a Birkenstock, pero el Tribunal Superior de Colonia revocó esa decisión. Finalmente, el Tribunal Federal de Justicia dictaminó que el diseño de las sandalias responde más a criterios funcionales que artísticos, impidiendo su clasificación como obra de arte aplicada.
Según el fallo, «el nivel de diseño no puede ser demasiado bajo para que un objeto obtenga protección como obra de arte». Además, el tribunal argumentó que «la mera aplicación de elementos formales de diseño técnico no justifica la protección bajo derechos de autor».
Diseño vs. funcionalidad: el eterno dilema
La decisión judicial reabre el debate sobre dónde se encuentra la frontera entre funcionalidad y expresión artística en el diseño industrial. Mientras algunos argumentan que los Birkenstocks han alcanzado un estatus cultural y estético digno de la protección artística, otros sostienen que su éxito proviene de su estructura ergonómica y no de una reinvención creativa.
Howard A. Smith, experto en propiedad intelectual, señala: «El diseño debe demostrar un carácter distintivo y originalidad para alcanzar la calificación de arte aplicado. En el caso de Birkenstock, su principal mérito es la funcionalidad, lo que dificulta su protección bajo derechos de autor».
El impacto de la decisión en la industria del calzado
La negativa del tribunal alemán a conceder derechos de autor sobre el diseño de los Birkenstocks tiene implicaciones significativas para la industria del calzado y la moda. Muchas marcas buscan proteger sus modelos de imitaciones a través de diferentes vías legales, incluyendo patentes de diseño y derechos de autor.
Birkenstock aún conserva la protección mediante marcas registradas y diseños industriales, pero este fallo podría animar a otros fabricantes a seguir creando versiones similares sin temor a futuras represalias legales.
¿Los Birkenstocks seguirán siendo un símbolo de moda?
A pesar del resultado de la demanda, la influencia de Birkenstock en la moda sigue intacta. En los últimos años, diseñadores como Rick Owens y Valentino han lanzado colaboraciones con la marca, elevando su estatus en el ámbito del lujo y la alta costura.
Mientras las tendencias van y vienen, los Birkenstocks han demostrado ser un elemento atemporal que trasciende los cambios de moda. Ya sea arte o simplemente un zapato cómodo, su lugar en la historia de la moda parece asegurado.