El Senado de EE.UU. avanza en la financiación del plan migratorio de Trump en una tensa sesión nocturna
Los republicanos buscan aprobar un paquete de 340 mil millones de dólares para deportaciones y seguridad fronteriza, mientras los demócratas intentan bloquearlo con una maratón de enmiendas.
El Senado de los Estados Unidos se encuentra en medio de una de sus sesiones más intensas, un 'vote-a-rama' nocturno destinado a aprobar un paquete presupuestario de 340 mil millones de dólares, el cual es clave en la agenda migratoria del expresidente Donald Trump.
Una batalla por la frontera
La iniciativa, impulsada principalmente por los republicanos, busca asegurar fondos para la deportación masiva de inmigrantes y otras medidas de seguridad en la frontera. El presidente del Comité de Presupuesto del Senado, Lindsey Graham, enfatizó que este es solo el inicio de un esfuerzo más grande para cumplir con las políticas de la administración Trump.
“Lo que estamos haciendo hoy es poner en marcha un proceso que permitirá al Partido Republicano cumplir con la agenda migratoria del presidente Trump”, declaró Graham al abrir el debate.
Detalles clave del paquete presupuestario
- 175 mil millones de dólares para seguridad fronteriza.
- 150 mil millones adicionales para el Pentágono.
- 20 mil millones para la Guardia Costera.
- Fondos destinados a la expansión de centros de detención y vuelos de deportación.
- Posible financiamiento mediante recortes en otros programas sociales y ambientales.
Aunque el Senado pueda aprobar este paquete, los fondos no estarán disponibles de inmediato. Es solo un marco presupuestario que servirá de guía para los distintos comités encargados de definir los detalles finales.
Los demócratas contraatacan
Con pocas opciones para detener la aprobación, los demócratas han recurrido a la introducción de múltiples enmiendas con la intención de obligar a los republicanos a tomar decisiones políticamente sensibles.
Una de las primeras enmiendas buscaba bloquear beneficios fiscales para multimillonarios, presentada como un rechazo a la ampliación de los recortes fiscales impulsados por Trump en 2017, los cuales según los demócratas favorecen a los más ricos.
“Este presupuesto es una hoja de ruta para recortes dolorosos en programas de los que dependen las familias todos los días, todo para que puedan dar más exenciones fiscales a los multimillonarios”, denunció la senadora Patty Murray.
La urgencia republicana
Desde el lado republicano, la prioridad es clara. El senador John Barrasso, el segundo republicano de mayor rango en el Senado, aseguró que la administración Trump necesita estos recursos de inmediato.
“La aprobación de este presupuesto nos permitirá terminar el muro, contratar más agentes de la patrulla fronteriza, ampliar la capacidad de los centros de detención y aumentar los vuelos de deportación”, explicó Barrasso.
Entre la seguridad nacional y la crisis humanitaria
El debate en el Senado también ha encendido reflexiones sobre la credibilidad de las políticas de deportación masiva. Expertos en derechos humanos han advertido sobre el impacto de estas medidas, incluyendo el colapso de familias y problemas legales con países receptores.
Por su parte, los republicanos insisten en que la inmigración irregular ha crecido descontroladamente y que sin nuevas políticas firmes, la situación solo empeorará.
El senador Dan Sullivan propuso una enmienda para reforzar Medicaid y Medicare, intentando desviar las críticas de que el paquete presupuestario afectará a servicios esenciales. La enmienda fue aprobada.
El próximo paso: impuestos y gasto social
Este conflicto presupuestario es solo una parte de una lucha más grande. La administración Trump también impulsa un paquete complementario para extender exenciones fiscales por 4.5 billones de dólares y aplicar posibles recortes de hasta 2 billones en sanidad y programas sociales.
El debate continuará durante los próximos meses, con el presidente fijando su mirada en consolidar su legado en materia de inmigración.