Bryan Kohberger: El juicio del caso de los estudiantes de Idaho seguirá adelante

El juez rechaza desechar pruebas clave en el caso del asesinato de cuatro estudiantes universitarios

Un caso que conmocionó a Estados Unidos

El caso de Bryan Kohberger, el hombre acusado de asesinar a cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho en noviembre de 2022, sigue avanzando en los tribunales después de que un juez rechazara una moción para desechar pruebas clave. La decisión allana el camino para que el juicio comience en el verano de 2024, marcando un hito importante en uno de los casos de asesinato más comentados en los últimos años en Estados Unidos.

Los terribles asesinatos

En la madrugada del 13 de noviembre de 2022, Ethan Chapin, Xana Kernodle, Madison Mogen y Kaylee Goncalves fueron brutalmente asesinados en una vivienda alquilada cerca del campus de la Universidad de Idaho en Moscú. Las autopsias revelaron que las víctimas probablemente dormían cuando fueron atacadas, algunas mostraban señales de haber intentado defenderse y todas recibieron múltiples puñaladas.

El crimen conmocionó a Moscú, una ciudad agrícola de apenas 25,000 habitantes que no había registrado un homicidio en varios años. La respuesta de las autoridades fue inmediata, pero durante semanas el caso carecía de sospechosos concretos, lo que aumentó la angustia de la comunidad universitaria y la población en general.

La detención de Bryan Kohberger

El 30 de diciembre de 2022, la policía arrestó a Bryan Kohberger en Pensilvania, a miles de kilómetros del lugar del crimen. Kohberger, de 30 años, era estudiante de doctorado en criminología en la Universidad Estatal de Washington en Pullman, ubicada a solo nueve millas del campus de Idaho.

Los investigadores lograron relacionarlo con la escena del crimen utilizando una técnica forense conocida como genealogía genética investigativa (IGG, por sus siglas en inglés). Se encontró ADN de Kohberger en la funda de un cuchillo recuperado en la casa donde se cometieron los asesinatos, lo que llevó a las autoridades a centrar su atención en él como principal sospechoso.

Pruebas bajo escrutinio legal

El equipo de defensa de Kohberger intentó que la corte desestimara las pruebas obtenidas mediante IGG, argumentando que la policía no solicitó órdenes de cateo para analizar el ADN de posibles familiares del sospechoso en bases de datos genealógicas.

Sin embargo, el juez Steven Hippler rechazó estos argumentos, concluyendo que el uso de la genealogía genética no violó los derechos constitucionales de Kohberger. Este fallo es crucial para la acusación, ya que mantiene en pie una de las pruebas más sólidas contra el acusado antes del juicio.

El perfil del sospechoso

Kohberger se graduó en 2018 con un título en Psicología de Northampton Community College y más tarde obtuvo una licenciatura y realizó estudios de posgrado en criminología en DeSales University en Pensilvania. Era un estudiante apasionado por la justicia criminal, lo que añade un giro inquietante a su conexión con el caso.

En redes sociales, algunas personas que lo conocieron lo describieron como una persona reservada y analítica, mientras que otros mencionaron que a veces se mostraba extraño o distante. Nada en su historial previo daba indicios de que podría estar involucrado en un crimen de esta magnitud.

¿Qué sigue en el proceso?

Con el juicio programado para agosto de 2024, la fiscalía ya ha señalado su intención de solicitar la pena de muerte si Kohberger es declarado culpable. A su vez, la defensa intentará desmantelar las pruebas presentadas por el estado y demostrar que su cliente no es el autor de los homicidios.

El juez ha impuesto una orden de silencio a todas las partes involucradas, lo que significa que fiscales, abogados y familiares de las víctimas no podrán hacer declaraciones públicas sobre el caso. También se ha decidido que no habrá cámaras en la sala del tribunal durante el juicio, una medida que busca garantizar un proceso imparcial.

Impacto del caso y el futuro

El caso de Bryan Kohberger ha generado un enorme interés a nivel nacional. Por un lado, ha puesto de relieve la eficacia y la controversia del uso de la genealogía genética en investigaciones criminales. Por otro, muestra cómo el miedo y la incertidumbre pueden afectar a una comunidad tras un crimen violento.

A medida que se acerca el juicio, el país seguirá con atención el desenlace de este caso que ha expuesto las complejidades del sistema judicial estadounidense y el impacto emocional que deja la tragedia en las familias y amigos de las víctimas.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press