El colapso de Nikola: De promesa en Wall Street a la bancarrota
La empresa de camiones eléctricos ha presentado la bancarrota bajo el Capítulo 11 tras escándalos y dificultades financieras
El ascenso y caída de Nikola
Nikola Corporation fue en algún momento una de las empresas más prometedoras en la industria de los vehículos eléctricos. Fundada en 2014 por Trevor Milton, la compañía se presentó como la alternativa disruptiva en la producción de camiones sin emisiones. Su éxito inicial llevó a un aumento significativo en el precio de sus acciones y despertó tanto el interés de inversores como de grandes fabricantes como General Motors.
Sin embargo, lo que parecía ser una historia de éxito rápidamente se convirtió en un escándalo cuando empezaron a surgir dudas sobre la viabilidad de sus productos.
El fraude de Trevor Milton
La debacle de Nikola tuvo su punto de inflexión en 2020 cuando se reveló que la compañía había engañado a inversores al mostrar un video donde un camión prototipo parecía estar en funcionamiento cuando en realidad solo estaba rodando cuesta abajo. Este video, entre otras afirmaciones exageradas del CEO Trevor Milton, provocó una ola de investigaciones que resultaron en su renuncia y posterior juicio.
En 2022, Milton fue condenado por fraude tras comprobarse que había engañado sistemáticamente a los inversionistas con promesas que la empresa no podía cumplir. Fue sentenciado en diciembre de 2023 a cuatro años de prisión por haber distorsionado la realidad sobre los avances tecnológicos de Nikola.
Los problemas financieros y la bancarrota
El escándalo de fraude dejó a Nikola en una posición crítica. La confianza de los inversionistas cayó en picada y la empresa tuvo que pagar $125 millones en 2021 para resolver una demanda civil interpuesta por la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC). A pesar de estos esfuerzos, la empresa continuó luchando con problemas financieros significativos.
El 2024 no fue más favorable. En enero, la compañía advirtió que podría quedarse sin dinero si no obtenía nuevos financiamientos. El pasado miércoles, Nikola Corp presentó oficialmente una solicitud de bancarrota bajo el Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras de Estados Unidos para el Distrito de Delaware. Según los documentos judiciales, la compañía contaba con solo $47 millones en efectivo, insuficientes para mantener su operatividad.
Intento final por mantenerse a flote
La empresa aseguró que continuará brindando un soporte limitado a los vehículos ya en circulación, incluyendo operaciones de recarga de combustible, al menos hasta finales de marzo si el tribunal lo aprueba. Sin embargo, la necesidad de nuevos financiamientos para garantizar estas operaciones post-marzo sigue siendo una preocupación clave.
Steve Girsky, CEO de Nikola, explicó que “como muchas otras compañías en la industria de vehículos eléctricos, hemos enfrentado diversos factores macroeconómicos y del mercado que han impactado nuestra capacidad de operar”. Agregó que la empresa hizo esfuerzos por reducir costos, eliminar deudas y recaudar capital adicional, pero esas estrategias no fueron suficientes.
Impacto en la industria de los vehículos eléctricos
El colapso de Nikola también refleja los desafíos más amplios que enfrenta la industria de los vehículos eléctricos, particularmente en el segmento de camiones pesados. Si bien Tesla y otras compañías han logrado consolidar ofertas comerciales más creíbles, la competencia y los altos costos de producción todavía imponen barreras significativas para nuevas empresas.
Las acciones de Nikola se desplomaron más de un 47% tras la noticia de la bancarrota, demostrando el impacto del anuncio en los mercados financieros.
A pesar de todo, la pregunta sigue siendo: ¿es este el final definitivo para Nikola, o existe alguna posibilidad de que resurja bajo una nueva estructura?