La censura literaria en EE.UU.: El legado de Toni Morrison y la batalla por la libertad de lectura
La celebración del Toni Morrison Day en Ohio se enfrenta a un creciente movimiento de censura en escuelas y bibliotecas
En medio de una creciente ola de censura literaria en Estados Unidos, legisladores y defensores de la alfabetización en Ohio han utilizado el Toni Morrison Day para alzar la voz a favor de la libertad de lectura. En un clima político donde los esfuerzos por prohibir libros se intensifican, los defensores de la libre expresión advierten del peligro de restringir el acceso a la literatura que desafía, educa y transforma.
El legado de Toni Morrison
Toni Morrison fue una de las escritoras más influyentes del siglo XX. Ganadora del Premio Nobel y del Pulitzer, su obra explora las complejidades de la identidad afroamericana a través de novelas icónicas como The Bluest Eye, Song of Solomon y Beloved. Nacida y criada en Lorain, Ohio, Morrison se convirtió en una voz fundamental que desafió las narrativas dominantes sobre la historia racial en Estados Unidos.
Su trabajo, sin embargo, ha sido objeto de numerosas prohibiciones. The Bluest Eye, por ejemplo, ha sido recurrentemente vetado en escuelas debido a su representación explícita de temas como el racismo y el abuso infantil. En respuesta a estos intentos de censura, Ohio estableció el Toni Morrison Day en 2020 mediante un voto bipartidista casi unánime.
El auge de la censura en Estados Unidos
La prohibición de libros no es un fenómeno nuevo, pero en los últimos años ha ganado tracción entre sectores conservadores de EE.UU. En estados como Texas y Florida, organizaciones han compilado listas de libros considerados “peligrosos” por tratar temas como la diversidad racial, la identidad de género y la historia de la opresión.
En Ohio, el grupo Protect Ohio Children Coalition ha liderado esfuerzos para identificar distritos escolares que supuestamente promueven materiales “radicales”. Esta organización ha elaborado un “mapa de adoctrinamiento” en el que señala escuelas y juntas educativas que, según ellos, imponen ideologías progresistas a los estudiantes.
¿Por qué es importante proteger la literatura desafiante?
La autora infantil Elisa Stone Leahy, de Right to Read Ohio, ha enfatizado la importancia de permitir que los niños tengan acceso a historias que expandan su visión del mundo. “Las palabras son poderosas, y eso significa que también pueden ser peligrosas”, señaló Leahy en una conferencia de prensa.
Según defensores del derecho a la lectura, restringir el acceso a ciertos libros no protege a los niños, sino que limita su capacidad de desarrollar el pensamiento crítico y la empatía. Un estudio de la American Library Association (ALA) encontró que en 2023, hubo un récord de más de 1,200 intentos de prohibición de libros en bibliotecas públicas y escolares, principalmente dirigidos a obras que abordan la diversidad racial y de género.
El impacto de la censura en la educación
La eliminación de libros en las escuelas y bibliotecas tiene implicaciones profundas en la educación de las nuevas generaciones. Según la National Council of Teachers of English (NCTE), los estudiantes que tienen acceso a una variedad de perspectivas a través de la literatura desarrollan mejores habilidades de análisis y comprensión.
El representante estatal Joe Miller, cuyo distrito incluye la ciudad natal de Morrison, ha subrayado que la alfabetización no solo mejora la educación formal, sino que impulsa la creatividad y la capacidad de empatizar con otras comunidades. Miller recordó cómo Morrison aprendió a leer y escribir usando tiza en las aceras de su ciudad, y cómo su talento floreció gracias a sus años en la biblioteca pública de Lorain.
La lucha por la libertad de lectura continúa
Sharon Hawkins, directora de Right to Read Ohio, recordó que la libertad de expresión no solo implica la posibilidad de hablar, sino también el derecho a recibir información. “Los tribunales han rechazado consistentemente los intentos de restringir el acceso a libros solo porque ciertos grupos no están de acuerdo con sus ideas”, afirmó.
Las bibliotecas y los educadores continúan su batalla contra la censura, argumentando que los libros desafiantes no deben ser eliminados, sino utilizados como herramientas para fomentar el diálogo y la comprensión entre generaciones. En un contexto donde las tensiones políticas parecen amenazar cada vez más la literatura comprometida, eventos como el Toni Morrison Day se convierten en recordatorios de la importancia de proteger la diversidad de voces en la educación estadounidense.