El impacto de la escasez de huevos en pequeños negocios en EE.UU.
La gripe aviar y la inflación han disparado los precios de los huevos, afectando panaderías, restaurantes y productores locales.
El huevo, un ingrediente clave bajo presión
Los pequeños negocios que dependen de los huevos para sus productos están enfrentando un problema serio: escasez y aumento de precios. La gripe aviar ha obligado a los granjeros a sacrificar millones de gallinas, lo que ha hecho que el costo de este ingrediente tan básico se dispare en Estados Unidos.
Según el Departamento de Agricultura de EE.UU., el precio promedio de una docena de huevos de grado A en ciudades estadounidenses alcanzó los $4.95 en enero de 2024, superando el récord de $4.82 establecido dos años antes. Para ponerlo en contexto, en agosto de 2023, el precio promedio era de solo $2.04. Las previsiones apuntan a que los precios podrían subir otro 20% este año.
Panaderías y restaurantes adaptándose a los cambios
Liz Berman, propietaria de The Sleepy Baker en Natick, Massachusetts, ha notado el impacto en su presupuesto. Como propietaria única, la falta de disponibilidad de los huevos que usualmente compra ha complicado su producción.
“No es solo el costo, sino la disponibilidad”, comenta Berman. Explica que solía comprar cajas con 18 docenas de huevos blancos medianos, pero hace dos semanas, tuvo que comprar huevos marrones en cartones individuales de 12, lo que ralentiza sus operaciones.
Por otro lado, John Nachlinger, dueño de The Bad Cookie Company en Princeton, Nueva Jersey, ha implementado un pequeño recargo de 25 centavos por galleta para hacer frente a los costos. “Las galletas ya tienen un margen de ganancia bajo, estos incrementos nos han afectado mucho”, menciona.
En Chicago, el restaurante Daisies está explorando opciones para reducir su consumo de huevos. Sus chefs Joe Frillman y Leigh Omilinsky han comenzado a introducir más postres veganos y a aprovechar ingredientes alternativos como la linaza.
Impacto en la producción y en los mercados locales
Las granjas también están experimentando desafíos, aunque con un matiz positivo: la demanda ha aumentado. Stephanie Maynard, copropietaria de Ox Hollow Farm en Roxbury, Connecticut, ha notado que más clientes buscan comprar en mercados agrícolas debido a los altos precios en supermercados.
Su granja cuenta con 950 gallinas ponedoras, con 300 más en camino. “Los clientes habituales están comprando más huevos de lo normal, y también estamos viendo muchas caras nuevas”, menciona Maynard.
Alternativas y ajustes en el sector
- Alternativas al huevo: Negocios gastronómicos han empezado a usar sustitutos como linaza, aquafaba o puré de frutas.
- Reducción del desperdicio: En panaderías y restaurantes, los chefs ahora aprovechan al máximo cada componente del huevo.
- Subida de precios: Algunos negocios han empezado a ajustar sus precios para compensar el alza.
Este problema no solo afecta a los pequeños comercios, sino también a los consumidores, quienes podrían enfrentar precios más altos incluso en productos donde el huevo es un ingrediente menor.
Con incertidumbre sobre la duración de esta crisis, los pequeños negocios encuentran maneras creativas para mantenerse a flote en un mercado cada vez más desafiante.