El inesperado oro del curling filipino en los Juegos de Invierno Asiáticos

El equipo de curling de Filipinas hizo historia al conseguir la primera medalla del país en los Juegos Asiáticos de Invierno con una sorprendente victoria sobre Corea del Sur.

Una hazaña histórica para el deporte filipino

En una gesta que parecía imposible para un país tropical, el equipo de curling de Filipinas logró conquistar la medalla de oro en los Juegos de Invierno Asiáticos en Harbin, China, al vencer a Corea del Sur en la final con un marcador de 5-3. Este triunfo no solo es un hito para el curling filipino, sino que además marca la primera medalla en la historia de Filipinas en estos Juegos.

Un equipo con raíces internacionales

Lo que hace aún más interesante esta victoria es la composición del equipo. Liderados por Marc Angelo Pfister y acompañado por Alan Beat Frei, Christian Patrick Haller, Enrico Gabriel Pfister y su suplente Benjo Delarmente, este grupo de atletas tiene una historia particular. La mayoría de ellos nacieron en Suiza, pero gracias a sus madres filipinas, son elegibles para representar a Filipinas en competiciones internacionales.

El capitán del equipo, Marc Pfister, ya contaba con experiencia representando a Suiza en tres campeonatos mundiales antes de decidir competir bajo la bandera filipina. Este cambio de nacionalidad deportiva se dio luego de que Filipinas fuera aceptada como miembro de la Federación Mundial de Curling en septiembre de 2023.

El camino hacia el oro

El equipo filipino ha sido un verdadero ejemplo de perseverancia y dedicación. Desde su admisión en la Federación Mundial de Curling, ha trabajado incansablemente para hacer realidad el sueño de representar a su país en una disciplina que, en principio, parecía ajena a la cultura deportiva de Filipinas.

Competir en un torneo de este calibre no era una tarea fácil, especialmente para un equipo que representa a un país sin tradición en los deportes de invierno. Sin embargo, la cohesión y la experiencia de los jugadores, combinadas con un gran trabajo en equipo, permitieron que Filipinas superara a equipos con una mayor trayectoria en el curling.

Un logro celebrado a nivel nacional

La victoria del equipo fue recibida con gran júbilo en Filipinas. El Comité Olímpico del país rápidamente publicó en sus redes sociales un mensaje de celebración: “¡Este es el primer oro para Filipinas en los Juegos Asiáticos de Invierno y el mayor logro de un atleta del sudeste asiático en la historia del torneo! ¡Qué increíble hazaña!”

Este título no solo pone a Filipinas en el mapa del curling, sino que también motiva a otros atletas del país a considerar deportes menos convencionales para competir en la escena internacional. Además, la federación nacional de curling ya tiene la vista puesta en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2026, y esta victoria podría ser el primer paso hacia una participación histórica en la máxima justa del deporte.

El futuro del curling en Filipinas

Si bien Filipinas no tiene una tradición consolidada en deportes de invierno, esta medalla de oro podría marcar el inicio de un creciente interés en el curling dentro del país. Tanto la federación nacional como otros organismos deportivos han comenzado a considerar la posibilidad de crear programas de entrenamiento y desarrollo para futuros talentos interesados en la disciplina.

El éxito del equipo filipino en Harbin sirve como inspiración para que más atletas de países sin clima invernal sueñen con participar en los deportes de hielo y nieve. Con el tiempo y la inversión adecuada, Filipinas podría consolidarse como una nación competitiva en curling a nivel asiático e incluso mundial.

Lo que parecía un sueño lejano, se ha convertido en una realidad histórica. Con esta victoria, Filipinas ha demostrado que el talento, el esfuerzo y la determinación pueden romper cualquier barrera climática o geográfica.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press