Sam Kerr absuelta de cargos por acoso racial: El juicio que sacudió el fútbol femenino
La estrella del Chelsea y capitana de Australia enfrentó un proceso judicial que puso en duda su imagen y su futuro en la selección nacional.
Sam Kerr, una de las futbolistas más destacadas del mundo, fue encontrada no culpable del cargo de acoso racialmente agravado contra un oficial de policía en Londres. El veredicto, anunciado tras siete días de juicio en el Kingston Crown Court, pone fin a un proceso que ha generado un intenso debate en Australia y en el mundo del fútbol femenino.
¿Qué provocó el juicio?
El incidente tuvo lugar después de una noche de fiesta en Londres, cuando Sam Kerr y su prometida, la futbolista estadounidense Kristie Mewis, fueron trasladadas a una comisaría en un taxi. Según el testimonio del conductor, las jugadoras se negaron a pagar los costos de limpieza después de que una de ellas vomitara en el vehículo y supuestamente rompieron una ventana trasera.
En la comisaría, Kerr se habría dirigido al oficial Stephen Lovell, llamándolo “estúpido y blanco”. La fiscalía argumentó que la expresión tenía una connotación racial agravante, mientras que la defensa de Kerr insistió en que sus palabras estaban relacionadas con la dinámica de poder y no con una intención de ofender racialmente.
El argumento de la defensa
Durante el juicio, la futbolista de origen anglo-indio declaró que se sintió atrapada y temió por su vida durante el trayecto en el taxi. Además, afirmó que su comentario no tenía un sentido ofensivo, sino que era una respuesta a lo que percibía como una actitud autoritaria de la policía.
“Yo creía que él usaba su poder y privilegio sobre mí porque me acusaba de ser algo que no soy”, testificó Kerr. También añadió que su comentario reflejaba su frustración ante una situación que consideraba injusta.
Reacciones y repercusiones
El caso atrajo una gran cantidad de atención en Australia, donde cada día del juicio fue minuciosamente analizado por los medios. Su puesto como capitana de la selección nacional, las Matildas, fue cuestionado por varios sectores, generando un debate sobre el comportamiento de las figuras públicas.
El presidente de la Federación de Fútbol de Australia, James Johnson, optó por no adelantar una postura sobre el futuro de Kerr en la selección hasta que terminara el juicio. “Entendemos que habrá decepción por parte de algunos fanáticos, pero pedimos que esperen al veredicto para tomar una decisión informada”, declaró antes de conocerse la resolución.
El regreso de Sam Kerr al fútbol
Más allá del escándalo judicial, Sam Kerr sigue siendo una de las jugadoras más brillantes del fútbol femenino. Desde que llegó al Chelsea en 2019, ha sido la máxima goleadora del equipo con 99 tantos en 128 partidos. Además, ha liderado a las Matildas en múltiples competiciones.
Lamentablemente, una lesión en el ligamento cruzado anterior sufrida en enero de 2024 la ha mantenido fuera de los campos, pero se espera su regreso en las próximas semanas. Kerr podría reaparecer justo a tiempo para representar a Australia en los amistosos contra Corea del Sur en abril como parte de la preparación para la Copa Asiática de la AFC 2026.
¿Qué significa esta absolución?
El veredicto ha resultado ser un alivio para Kerr y sus seguidores, pero el caso ha dejado algunas marcas en su reputación. A pesar de haber sido absuelta, el juez mencionó que su comportamiento contribuyó significativamente a que se presentara la acusación en primer lugar.
En un deporte donde las estrellas juegan un papel crucial como modelos a seguir para las nuevas generaciones, el juicio de Kerr ha generado un debate sobre los límites del comportamiento fuera del campo y la responsabilidad de los atletas en su vida personal. ¿Debe el fútbol castigar o dejar pasar situaciones así? Es una pregunta que seguirá abierta en el mundo deportivo.