Los mejores comerciales del Super Bowl 2025: humor, nostalgia y estrellas

Una mirada a los anuncios más memorables del Super Bowl, desde risas garantizadas hasta momentos conmovedores.

El Super Bowl no solo es el evento deportivo más esperado del año en Estados Unidos, sino también el escenario de los comerciales más creativos y costosos de la industria publicitaria. Las marcas compiten ferozmente por captar la atención de la audiencia en solo 30 segundos —tiempo por el que han pagado hasta 8 millones de dólares en 2025.

Un año para reírse: el humor domina

Este año, muchas empresas optaron por el camino seguro del humor, confiando en que la risa es un recurso universal para conectar con el público. Los comerciales lanzados hasta ahora han mostrado desde cuatro ancianas al volante en un anuncio de WeatherTech, hasta las cejas voladoras de Eugene Levy tras probar una pizza de Little Caesars.

Coors Light presentó a unos curiosos perezosos atrapados en un lunes, mientras que Nestlé Coffee Mate hizo que la lengua de un hombre comenzara a bailar con la espuma de su café. En una nota aún más extravagante, el cantante británico Seal se convirtió en una foca que lucha por sostener una botella de Mountain Dew con sus aletas.

Nostalgia que toca el corazón

Las emociones también jugaron un papel clave. Budweiser trajo de vuelta a sus icónicos caballos Clydesdale, esta vez con un potrillo que sueña con unirse a la entrega de barriles. Por otro lado, Meg Ryan y Billy Crystal revivieron la escena de la famosa película "When Harry Met Sally" para promocionar la mayonesa Hellmann’s.

En otro golpe al recuerdo, los Muppets compararon hoteles con Booking.com, mientras que Instacart trajo de vuelta a personajes clásicos como Mr. Clean, el Jolly Green Giant y el Pillsbury Doughboy. Disney, por su parte, hizo una reflexión sobre qué pasaría si nunca hubiéramos conocido a Elsa de “Frozen”, Bart Simpson o los superhéroes de Marvel.

Combinaciones de celebridades inesperadas

Un truco publicitario recurrente es juntar a celebridades de diferentes ámbitos en situaciones inesperadas. Este año, el comercial de Michelob Ultra transformó a Catherine O'Hara y Willem Dafoe en campeones de pickleball, mientras que David Beckham y Matt Damon descubrieron que son hermanos perdidos en una campaña de Stella Artois.

Otras colaboraciones incluyeron a Gordon Ramsay y Pete Davidson promocionando HexClad, y a una inusual dupla compuesta por Post Malone, Shane Gillis y Peyton Manning disfrutando de una fiesta con Bud Light.

Los anuncios serios también tuvieron su espacio

A pesar del dominio del humor, algunos comerciales apostaron por mensajes más reflexivos. Novartis destacó la importancia de la detección temprana del cáncer de mama, mientras que Dove llamó la atención sobre el hecho de que la mitad de las niñas que abandonan los deportes lo hacen debido a críticas sobre su cuerpo.

Otras marcas, como Hims & Hers, abordaron el problema de la obesidad en Estados Unidos, y la Fundación para Combatir el Antisemitismo reunió a Snoop Dogg y Tom Brady en un anuncio reflexivo sobre los prejuicios.

La inteligencia artificial también llegó a los comerciales

Varias empresas se subieron a la ola de la inteligencia artificial en sus anuncios. Meta mostró a Chris Pratt, Chris Hemsworth y Kris Jenner probando sus gafas inteligentes, las cuales usan IA para responder preguntas en tiempo real. Google, por su parte, utilizó su asistente Gemini para destacar pequeños negocios en distintas partes de EE.UU.

Por otro lado, la marca de botellas de agua Cirkul hizo una parodia de la IA, mostrando a Adam Devine accidentalmente ordenando 100,000 botellas a través de un asistente virtual defectuoso.

El dilema de los anunciantes: jugar a lo seguro o arriesgarse

Según Tim Calkins, profesor de marketing en la Universidad Northwestern, “Este fue un año complicado para los anunciantes”. Debido a que muchas campañas se desarrollaron en medio de la polarización política y las elecciones presidenciales en EE.UU., las marcas evitaron riesgos y apostaron por comerciales seguros.

Sin embargo, Calkins advierte que esta estrategia tiene sus propios riesgos. “Un anuncio seguro no es un anuncio memorable”, menciona. En un entorno donde las campañas deben captar el interés en pocos segundos, el reto es encontrar el equilibrio entre seguridad y creatividad.

Los anuncios del Super Bowl 2025 reflejaron un deseo general por diversión y momentos nostálgicos, con una combinación de comedia ligera, estrellas de renombre y tecnología emergente. A pesar de las tendencias seguras, algunos comerciales lograron dejar una huella duradera en la audiencia.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press