Lesión de Dejounte Murray y el complejo panorama de los Pelicans en la NBA
El guardia estrella verá pausada su carrera tras una rotura del tendón de Aquiles, sumando otro capítulo a la desafortunada temporada de New Orleans.
El golpe más duro para los Pelicans
Dejounte Murray, una de las figuras más destacadas de los New Orleans Pelicans, ha sufrido una ruptura en el tendón de Aquiles derecho que terminará con su temporada y llevará a un largo proceso de rehabilitación. La lesión ocurrió en el reciente partido contra los Boston Celtics, cuando Murray cayó sin contacto tras perseguir un rebote. Las especulaciones sobre la gravedad del incidente se confirmaron tras una resonancia magnética realizada esa misma noche.
“Es una situación devastadora para el equipo y para él como persona”, comentó el entrenador Willie Green. Estas palabras reflejan el sentimiento de una franquicia que ya venía cargando con una larga lista de contratiempos en la temporada.
Una temporada marcada por las lesiones
La temporada 2024-25 ha estado lejos de las esperanzas iniciales para los Pelicans. Murray se une a una lista de jugadores clave que han sufrido lesiones, incluyendo a Zion Williamson, Brandon Ingram y Herb Jones. Zion, por ejemplo, ha estado ausente en 36 partidos debido a problemas en los isquiotibiales, mientras que Ingram no ha jugado en los últimos 25 encuentros debido a un esguince en el tobillo.
Esto ha dejado a los Pelicans con una marca de 12-37, situándolos penúltimos en la Conferencia del Oeste. Más allá de los resultados, la constante rotación de jugadores ha impedido que el equipo logre cualquier tipo de cohesión en el campo.
El impacto emocional y humano
En declaraciones tras el partido, el guardia José Alvarado resumió el sentir del equipo: “Eso lastima. Murray es como un hermano para todos nosotros. Esto es más grande que el baloncesto”. Las palabras de Alvarado destacan cómo las lesiones afectan no solo los planes deportivos, sino también el ánimo del vestuario.
Green también ofreció un enfoque más amplio: “Esta es la dificultad de la NBA, pero hay cosas mucho más difíciles ahí afuera. Lo que vimos en las noticias recientes con los ataques o los accidentes de avión nos recuerda que siempre hay que poner las cosas en perspectiva”.
Murray y un historial complicado
Esta no es la primera lesión importante de Murray en su carrera. El jugador ya se había enfrentado a una recuperación significativa tras romperse el ligamento cruzado anterior (LCA) en 2018, lo que le costó perderse toda esa temporada. Esa resiliencia será clave en su recuperación actual, que podría extenderse hasta 12 meses, poniendo en duda su presencia al inicio de la próxima temporada, programado para octubre.
A pesar de los obstáculos, Murray venía mostrando su calidad esta campaña con promedios de 17.5 puntos, 7.4 asistencias y 6.5 rebotes por partido. Su contrato de cuatro años y $114.2 millones firmado el pasado verano simbolizaba la apuesta de los Pelicans por construir un núcleo fuerte alrededor de él, Zion e Ingram.
¿Qué sigue para los Pelicans?
La gerencia del equipo tiene mucho que considerar de cara al futuro. Con la fecha límite de traspasos acercándose, las oportunidades para ajustar y reforzar el equipo parecen ser limitadas. Sin embargo, el desarrollo de jóvenes talentos como Herb Jones y Trey Murphy III podría ofrecer algo de luz en una temporada llena de sombras.
Más allá de las movidas que puedan realizarse, es evidente que los Pelicans deben centrarse en la salud de su plantilla y en cómo maximizar el potencial de su trío estelar cuando todos estén disponibles. El panorama no es sencillo, pero tampoco imposible si logran dar el giro necesario.
Reflexiones sobre los tiempos difíciles
La situación de New Orleans subraya los desafíos inherentes de la NBA, donde los imprevistos pueden desmoronar incluso a equipos con grandes expectativas. Como dijo el propio entrenador Green, mantener la perspectiva y enfocarse en las bases puede marcar la diferencia a largo plazo.
De cara al resto de la temporada, los Pelicans buscarán extraer valor de sus recursos actuales y prepararse para lo que viene. Murray, mientras tanto, afrontará un camino largo y arduo de recuperación, con la esperanza de regresar al máximo nivel para liderar nuevamente a su equipo.