Nissan enfrenta recortes en Estados Unidos mientras busca un regreso a la rentabilidad

La multinacional automotriz Nissan ha decidido tomar medidas drásticas en sus plantas estadounidenses en un esfuerzo por volver a la rentabilidad. Estos ajustes incluyen la reducción de turnos y la oferta de incentivos de retiro voluntario para sus empleados. Los recortes forman parte del plan previamente anunciado por Nissan de reducir 9,000 empleos a nivel mundial y disminuir su capacidad de producción global en un 20%.

Los cambios en las plantas de Estados Unidos

En la planta de Smyrna, Tennessee, conocida por producir los modelos Murano, Pathfinder y Rogue, así como el Infiniti QX60 de lujo, una de las líneas de producción pasará a operar con solo un turno. Mientras tanto, en la planta de Canton, Mississippi, que fabrica el sedán Altima y la camioneta Frontier, se está reduciendo la velocidad de una línea de producción y consolidando otra. Por su parte, la planta de Decherd, también en Tennessee, que produce motores, hará ajustes graduales en sus turnos.

La fuerza laboral total de Nissan supera los 133,000 empleados a nivel mundial, por lo que la reducción de 9,000 empleos representa alrededor del 6% de su plantilla. La compañía afirmó que estas medidas son necesarias para crear un negocio más eficiente y resiliente capaz de adaptarse rápidamente a los cambios del mercado.

Un contexto global complicado

Este ajuste en Estados Unidos es solo una parte del plan de reconstrucción de Nissan, que sigue lidiando con una pérdida trimestral y una caída en las ventas globales. Además, Nissan también ha acumulado inventarios significativos, lo que ha agravado su situación financiera y ha obligado a tomar decisiones rápidas para optimizar sus operaciones.

En Japón, las acciones de Nissan subieron un 2.2% tras el anuncio de los planes en Estados Unidos. Esto refleja una leve confianza de los inversores en los esfuerzos de reestructuración de la empresa.

Colaboración estratégica con Honda

Además de los ajustes en producción, Nissan está trabajando en estrecha colaboración con Honda, otro gigante automovilístico japonés. Las dos empresas planean formar una compañía conjunta en 2026 con el objetivo de potenciar la producción de vehículos eléctricos. Este movimiento es crucial en un mercado donde las regulaciones ambientales y la demanda de alternativas sostenibles están en constante aumento.

Perspectiva a futuro

Nissan espera presentar sus resultados financieros del trimestre octubre-diciembre el 13 de febrero. Según los analistas, estos resultados servirán como un indicador clave de si las estrategias aplicadas están teniendo éxito. "Nissan está tomando medidas urgentes globalmente para revertir su desempeño y crear un negocio más ágil y adaptable", detalló la compañía en un comunicado.

Sin embargo, el camino hacia la recuperación no será fácil. Los desafíos de un mercado automotriz global competitivo, sumados a la progresiva electrificación y digitalización de la industria, imponen una presión significativa sobre la empresa para estandarizar operaciones al tiempo que innova en tecnologías limpias y eficientes.