La Amazonia y el impacto de la política exterior bajo el regreso de Trump

El futuro del pulmón verde del planeta bajo la sombra de políticas pro desarrollo y negacionismo climático.

La Amazonia: un ecosistema en peligro constante

La Amazonia, conocida como el pulmón verde del planeta, enfrenta desafíos formidables en un mundo cambiante. Con su exuberante biodiversidad y su papel crucial en la regulación del clima global, esta región ha estado bajo amenaza constante por actividades humanas, como la deforestación y la minería ilegal. Sin embargo, el regreso de ciertas políticas internacionales plantea riesgos adicionales que podrían agravar la situación.

Políticas climáticas bajo la administración de Trump: una mirada crítica

Desde que Donald Trump asumió nuevamente el cargo de presidente en enero de 2025, el futuro de políticas climáticas y ambientales ha sido una preocupación para los defensores del medio ambiente. Desde el primer día de su segunda administración, Trump ha firmado varias órdenes ejecutivas priorizando la explotación de combustibles fósiles, lo que representa un cambio abrupto con respecto al enfoque más ambientalista de la administración Biden.

Por ejemplo, durante el mandato de Biden, se prometieron $50 millones al Fondo Amazonia, destinados a intensificar la protección de la región. Estos recursos resultaron vitales para combatir actividades ilegales como la minería y la tala. Sin embargo, bajo la administración de Trump, los expertos temen que esa financiación se reduzca o incluso se elimine por completo.

Como señala Carlos Nobre, un destacado científico climático brasileño, esta falta de apoyo podría ser catastrófica: "La Amazonia necesita políticas ambiciosas, no un retroceso en los compromisos climáticos".

El apoyo a líderes pro desarrollo: una amenaza para la Amazonia

El apoyo de la administración Trump a políticos de extrema derecha en Brasil, como el expresidente Jair Bolsonaro y posibles sucesores como su hijo Eduardo Bolsonaro, también representa una amenaza significativa. Bolsonaro, quien ocupó la presidencia de Brasil entre 2019 y 2022, fue conocido por su postura a favor del desarrollo agresivo de la Amazonia, permitiendo un aumento preocupante de la deforestación en beneficio de industrias como la agricultura y la minería.

Aunque Luiz Inácio Lula da Silva, actual presidente de Brasil, ha avanzado en proteger la Amazonia, el regreso de Trump podría reforzar a movimientos políticos que buscan desmantelar estas políticas. Según Andrew Miller, director de Amazon Watch: "Trump 2.0 ofrece a los gobiernos amazónicos una estructura de permiso para ignorar o retroceder en compromisos climáticos, precisamente cuando la protección de la selva tropical demanda mayor ambición y cooperación regional".

Impacto en las comunidades indígenas y locales

Las comunidades indígenas, que han vivido en equilibrio con la selva durante generaciones, están entre las más afectadas. Líderes como Alexis Damancio Silva, de Puerto Nariño, Colombia, resienten la falta de ayuda suficiente para mitigar los impactos de fenómenos como las sequías extremas. Mientras tanto, el regreso de políticas que priorizan la economía sobre la sostenibilidad podría agravar su situación.

"Necesitamos recursos para hacer nuestras comunidades más resilientes, cisternas para recoger agua de lluvia y paneles solares para refrigerar el pescado", comentó Silva en una entrevista. El temor es que, sin apoyo internacional, estas comunidades seguirán siendo las más vulnerables ante los efectos del cambio climático.

La presión internacional y las esperanzas de resistencia

A pesar del panorama desalentador, hay motivos para la esperanza. La comunidad internacional, liderada por países como Brasil bajo el mandato de Lula y ministros comprometidos como Marina Silva, está reforzando mecanismos de gobernanza climática. "Hoy en día tenemos una gobernanza climática más sólida, lo que nos da herramientas para resistir políticas regresivas", declaró Marina Silva.

Además, empresas y líderes globales han comenzado a revaluar compromisos climáticos. Sin embargo, las señales mixtas, como el retiro de algunos bancos estadounidenses de redes financieras sostenibles, plantean dilemas sobre hasta qué punto el sector privado puede asumir un papel de liderazgo en la protección ambiental.

La Doomsday Clock y el reflejo de una crisis global

El impacto del cambio climático no es un desafío aislado; está vinculado a otras amenazas globales. Hace pocos días, el «Reloj del Juicio Final», un indicador simbólico desarrollado por el Bulletin of the Atomic Scientists, se estableció en 89 segundos para la medianoche, el punto más cercano en la historia. Este ajuste refleja preocupaciones sobre asuntos como el cambio climático, la inestabilidad geopolítica y el uso de inteligencia artificial en armamento.

"Cuando estás al borde del precipicio, lo último que quieres hacer es dar un paso más", señaló Daniel Holz, presidente de la junta de ciencia y seguridad de la organización.

El mensaje es claro: la cooperación global es esencial para abordar desafíos existenciales como el cambio climático y la destrucción de ecosistemas vitales como la Amazonia.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press