Josh Allen y los Buffalo Bills: Reflexiones tras otro tropiezo en la AFC

El mariscal de campo y su equipo enfrentan un futuro incierto después de años de cerca, pero sin alcanzar la gloria del Super Bowl.

Un déjà vu difícil de digerir

Contra todo pronóstico, los Buffalo Bills se encontraron eliminados nuevamente en el juego de campeonato de la AFC. La derrota 32-29 contra los Kansas City Chiefs, actuales bicampeones del Super Bowl, dejó un sabor amargo a Josh Allen y compañía. Para un equipo que acumula cinco títulos divisionales consecutivos y una regularidad envidiable en la NFL, el peso de la narrativa de "casi pero no" parece más fuerte que nunca.

El peso sobre los hombros de Allen

Josh Allen, quien comenzó la temporada como favorito para el premio MVP, se culpó a sí mismo tras la derrota. "No puedes simplemente tocar la puerta, tienes que derribarla", comentó en una rueda de prensa cargada de autocrítica. Su pase fallido en un intento desesperado en cuarta oportunidad será un recuerdo difícil de olvidar. Aunque es apabullante pensar que Allen ha liderado a su equipo para convertirse en el primero en anotar 30 touchdowns tanto por tierra como por pase en una misma temporada, las victorias morales no llenan los vacíos dejados por las derrotas.

Números impresionantes, pero insuficientes

Los Bills igualaron un récord de franquicia con 13 victorias en temporada regular y lograron una hazaña única al vencer a los dos primeros sembrados de sus respectivas conferencias (Kansas City y Detroit) durante la campaña. Además, superaron a los Broncos de Bo Nix y a los Ravens de Lamar Jackson en los playoffs antes de sucumbir nuevamente ante Patrick Mahomes y los Chiefs.

A pesar de estos logros, este equipo es ahora el primero en la historia de la NFL en ganar 11 o más juegos en cinco temporadas consecutivas sin alcanzar al menos un Super Bowl en ese lapso. Una estadística abrumadora que, más que orgullo, añade presión para el futuro.

El apoyo de los compañeros

Dentro del vestuario, el sentimiento hacia Allen sigue siendo de admiración y gratitud. “Tiene toda la ciudad en sus hombros y lo lleva con gracia”, dijo el tight end Dawson Knox. Comentarios como estos reflejan la fe del equipo en su líder, pero también subrayan el peso emocional que recae sobre Allen.

¿Jugadores clave de partida?

El futuro inmediato trae consigo decisiones complicadas. El edge rusher Von Miller, a punto de cumplir 36 años, afirmó que desea quedarse, a pesar de que su contrato podría ser reestructurado para liberar espacio salarial. En tanto, el tight end Dalton Kincaid jugó lesionado, con un ligamento PCL desgarrado.

Además, con 11 jugadores elegibles para convertirse en agentes libres, la lista incluye nombres esenciales como el cornerback Rasul Douglas, el safety Damar Hamlin o los receptores Amari Cooper y Mack Hollins. La administración deberá enfrentar este campo minado para configurar un equipo competitivo de cara a la próxima temporada.

El eterno obstáculo llamado Kansas City

En 2025, Buffalo se enfrentará nuevamente a los Chiefs, el sexto duelo en seis años entre ambos equipos. Los Bills deberán superar este "muro psicológico", elevar su juego y demostrar que pueden vencer finalmente a un rival que les ha negado el paso a la cima.

En palabras del propio Allen: "Es difícil ganar Super Bowls en esta liga. No solo debes derrotar a equipos como los Chiefs, tienes que quitárselos. Y no lo hicimos esta vez".

¿Dónde están los ajustes?

El coach Sean McDermott y su cuerpo técnico están en la mira para realizar los ajustes necesarios y romper el ciclo de frustración. Las estadísticas y talentos están ahí, pero las oportunidades perdidas y las decisiones en momentos críticos son las que han marcado la diferencia.

Mirando hacia adelante

A pesar de la decepción, queda la sensación de que el equipo no está tan lejos de alcanzar el objetivo máximo. La pregunta sigue siendo: ¿Cómo hacer esa transición de "estar cerca" a finalmente "lograrlo"? La respuesta podría llegar en el próximo capítulo de esta rivalidad Buffalo-Kansas City, pero para Allen, McDermott y el resto del equipo, el tiempo corre.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press