Parámetros para una relación de pareja sana
Siempre es necesario, cuando estamos en una relación sentimental, saber cuáles son los parámetros en los que deberíamos manejar nuestra relación, a fin de que esta no se torne un karma y termine por asfixiarnos.
Una relación se construye de a dos, es decir, para que exista una relación debe haber dos personas involucradas. Pero, ¿a qué me refiero con la palabra involucrados? Esto se refiere a que ambos deben estar comprometidos a llevar la relación hacia adelante.
Ahora, para poder gozar de una relación de pareja, que debe de ser sana en todos los aspectos, lo primero que debemos de tener en cuenta es que debemos estar bien con nosotros mismos antes que nada, es decir, sentirnos tranquilos con nuestra soltería, siendo felices con nuestras vidas y no esperar que esta persona tenga que venir a llenar ningún vacío existencial, ni sanar traumas o a ser nuestro paño de lágrimas y menos, claramente, a ser nuestro motivo de vida.
Cuando una persona se siente tranquila y feliz con su vida personal, no necesita de nadie para completarla; ahí es cuando pudiera ser lo ideal para empezar una relación, pensando que esta persona que viene no viene para ser su complemento, porque se supone que no le falta nada para sentirse completo, sino que viene a disfrutar con ella la vida, a sumar nuevas experiencias y a formar un equipo donde cada uno aporte su cuota para llevar la relación y sostenerla en el tiempo.
Ahora, ¿cuándo se podría decir que una relación es sana?, o ¿qué características debe tener una relación sana? Según los psicólogos deberían existir como mínimo estos parámetros:
1. Individualidad: Es necesario que cada persona conserve su individualidad, es decir, su espacio propio, sus actividades de manera independiente, sus amistades, sus hobbies y no que necesariamente deba incluir en toda su vida a su pareja, sino que cada uno mantenga su propia individualidad.
2. Respeto: Cada persona debe sentirse respetada por su pareja, es decir, hablarse con respeto, sin gritos o malas palabras, sin críticas destructivas u ofensas, escuchando el punto de vista del otro, sin imponer sus pensamientos, pero sí respetando la forma de pensar del otro, intentando llegar siempre a un consenso que pueda favorecer a ambas partes.
3. Límites: Una relación no puede funcionar si no existen límites o sus no negociables, los cuales deben ser expresados de manera clara al otro, para que cada uno sepa cuáles son las barreras que no deben de cruzar. Pues no todas las personas están dispuestas a tolerar ciertas situaciones y cada vez que sientas que tu pareja está pasando a llevar tus límites, debes de ser capaz de enfrentar la situación y ponerle freno.
4. Fidelidad: La fidelidad es algo muy importante en una relación sana. Si has decidido estar con una persona, debes respetar el vínculo siendo fiel a tu pareja, evitando las coqueterías con otras personas, mensajes subidos de tono o todo aquello que pueda hacer sentir mal a tu pareja, ya que la fidelidad no solo se traduce a las relaciones íntimas, sino que para algunas personas hablar y coquetear seguidamente con otra persona es también infidelidad, así como enviar fotos sexys o lo que sea que le falte el respeto a la pareja.
5. Comunicación: Este es el pilar fundamental de una relación sana, uno de los más importantes, porque una relación en el tiempo se sostiene con buena comunicación. No podemos pretender llevar adelante una relación donde yo no soy capaz de comunicar lo que siento, lo que me desagrada, lo que me lastima, lo que me gusta o no, por ejemplo, en la intimidad, etc. También cada parte debe de poder expresarse libremente y sin temor para dar su opinión, sin que esto moleste al otro; es decir, la comunicación es y será esencial en una relación, porque para poder solucionar un conflicto ambas partes deben de saber comunicarse de manera asertiva, estando abiertas al diálogo, para así poder llegar a encontrar un punto de equilibrio en la relación.
6. Compatibilidad: Es cierto que cada uno puede aportar en diferentes aspectos a la relación; sin embargo, a veces hay cosas que son incompatibles y, por más que deseemos estar al lado de alguien, no va a resultar si somos incompatibles. Por ejemplo, si yo estoy segura de que no deseo tener hijos y mi pareja, desde que lo conocí, habla de querer tener 3 hijos, entonces nos encontramos frente a una incompatibilidad de relación, pues no puedes seguir invirtiendo tiempo en una relación que tarde o temprano se va a desmoronar por estas incompatibilidades, que no son menores, pues este tipo de cosas son fundamentales para poder visualizar un futuro juntos.
7. Proyecto en común: Una pareja, para mantenerse en el tiempo, necesita tener proyectos en común, no necesariamente un gran proyecto, sino cosas pequeñas, como planificar un viaje juntos, unas vacaciones, tener ilusiones a concretar en el futuro donde ambos estén presentes en la vida del otro, donde cada uno planifique su vida pensando e incluyendo a su pareja. Pues si no hay ningún proyecto en común, si tu pareja no te tiene en cuenta para ningún plan importante, es más que seguro que esa relación no tiene ningún futuro y solo estarás perdiendo tu tiempo.
Bueno, para concluir, una relación sana siempre va a ser aquella que te haga sentir bien, te haga ser mejor persona, donde te sientas motivado, optimista por un futuro juntos, donde sientas que tienes tu espacio y tienes libertad para ser tú mismo, sin sentirte objetado o reprimido. Otra cosa importante es que vas a estar con la persona ideal, cuando tú te sientas también la persona ideal. Por eso, también nunca se debe responsabilizar al otro por los problemas de la relación, pues cada uno debe trabajar en sus debilidades y en crecer como persona cada día, para que así la relación también pueda evolucionar en todos los aspectos. ¿Tú qué opinas?