El desinterés como estrategia de conquista
El interés en los tiempos modernos se ha transformado en más que un dolor de cabeza para algunos, pues no es fácil entender cómo hemos ido cambiando con el pasar de los años, las décadas y los tiempos, y me refiero al interés romántico en las relaciones de pareja.
Antiguamente, se sabía sin tanto rodeo si alguien estaba interesado de manera fácil: te invitaban a salir y decías que sí, ya con eso demostrabas el interés, te pedían el teléfono y te decían que te llamarían y lo hacían, simplemente había interés y se notaba.
Ahora la situación ha cambiado bastante; parece que el demostrar desinterés es la moda y nos hemos ido acostumbrando a esta situación.
Es así como cuando te llega un mensaje, te dices a ti mismo, dejándote llevar por la ola emergente de los nuevos tiempos, "no le voy a contestar aún", no quiero que piense que estoy muy interesada o interesado. Pero yo me pregunto, ¿no es esa la idea al intentar entablar una relación con alguien, el que este sepa que tenemos interés? Así dejamos pasar las horas, para no contestar de forma rápida, aunque a veces quieres abrir ese mensaje reprimiéndote para no hacerlo por el miedo a no verte necesitado o ansioso.
Y es así como vivimos en la incertidumbre de no saber si demostrar que alguien nos gusta, nos interesa o si queremos una relación, porque vivimos tratando de ocultar nuestros sentimientos para no vernos intensos o ansiosos, cuando debiera ser al revés; deberíamos expresarlos de manera clara y sin tantos rodeos.
Así es como a veces también le hacemos perder tiempo a las personas que intentan tener un acercamiento hacia nosotros, porque no les decimos tampoco de forma clara que no nos interesan. Por ejemplo, te invitan a salir y tú respondes con excusas y evasivas, por no decir de forma sincera que no estamos interesados, y esto sucede porque es más fácil dilatar las cosas que decir la verdad de forma más clara y honesta.
No es mejor ser auténtico, real y honesto a la hora de tener una relación o de buscar pareja.
Tampoco podemos decir que buscamos una relación seria, porque parece que eso ahora espanta a los postulantes, o sea, tenemos que fingir que no buscamos nada serio, sino que ahí veremos, o que dejaremos que las cosas fluyan, frase que está muy de moda últimamente y que a mí personalmente me produce molestia, porque ninguna relación fluirá por arte de magia.
Ahora dejar que todo fluya es como dejar un barco solo en el mar, sin capitán y a la deriva. Pues una relación no fluye sola, sino que se construye con base en una decisión, ósea, si yo deseo tener una relación, tengo que asumir que esta no va a fluir de manera automática, que debo trabajar en ella, porque en todo proyecto hay problemas, imprevistos, hay que tomar decisiones, poner límites y, obviamente, conocer y estudiar el proyecto para que este resulte. Entonces, ¿por qué sería diferente en una relación? No habría que poner esfuerzo, dedicación e interés en ello para que resulte.
Pero muchos se encuentran sin saber qué quieren o qué desean en el ámbito romántico y, como no tienen nada claro, dicen que dejarán que las cosas fluyan, lo cual es un error a toda luz, porque para empezar una relación, lo mínimo es definir las características de esta, nuestros no negociables, nuestros intereses y las cualidades que debe tener el postulante. También tener claro que si no busco una relación y solo deseo algo casual, debo ser honesto con esta información desde un principio, para no hacer perder el tiempo a quienes sí buscan algo más que un par de noches de sexo.
Ahora que ya estamos saliendo en citas y parece que has encontrado a la persona ideal para llegar a la relación que buscas, algunos comienzan con estos jueguitos tontos de no demostrar interés, de dejar esperando a la persona por horas para no contestar rápidamente y no verse así muy necesitados o muy desesperados; te tratas de hacer el interesante o el ocupado, para que la otra persona no piense que estás demasiado interesado. Lo cual es un grave error, porque no tiene nada de malo contestarle a la persona que te gusta, a la persona que quieres o de la cual estás enamorado. ¿Por qué tienes que actuar demostrando poco interés cuando si tienes interés, cuando la realidad es que si quieres recibir ese mensaje y te alegra el día cuando ese mensaje llega a tu chat? ¿Por qué fingir un estado de desinterés cuando la verdad es otra? Por qué mejor no ser real, genuino y honesto. Y no se trata de que estés las 24/7 horas del día a la disposición del otro, porque se entiende que tienes trabajo, obligaciones, hobbies o lo que sea en que ocupes tu tiempo, sino que se trata de que, si ves el mensaje y tienes tiempo para contestar, lo hagas sin tanto trámite, que actúes de manera genuina y honesta, sin tener que fingir. Obviamente, si estás ocupado, no vas a contestar de inmediato, pero lo harás en el menor tiempo posible.
En resumen, dejemos de creer que no demostrar interés hará que las cosas en una relación funcionen mejor y que la persona se involucre así más en la relación, porque en el fondo, esto no es más que una especie de manipulación y la realidad de las cosas es que esto no hace más que dañar a la relación y sepultarla; pues tarde o temprano estas situaciones salen a la luz y la otra persona se dará cuenta y se cansará de ser ignorada o postergada.
Seamos personas con inteligencia emocional que logran ser empáticas con los sentimientos del otro, tengamos responsabilidad afectiva entendiendo que el no ser sincero en demostrar de forma explícita nuestro interés o desinterés es confuso y dañino para la otra persona y, por último, comuniquémonos de forma asertiva para dar a conocer nuestras necesidades emocionales de forma clara al otro; esa es la clave. Debemos actuar de forma madura y consciente si lo que realmente queremos es captar el interés real de la otra persona y no con estrategias tontas que no se sostienen en el tiempo, las cuales no hacen más que entorpecer las relaciones. ¿Tú qué piensas?