Daniels y Commanders ponen a prueba su sorpresiva temporada ante la defensiva de Pittsburgh
Jayden Daniels llegó a Washington y le cambió la cara a una franquicia que llevaba décadas sumida en la mediocridad. Con el pasador novato detrás del centro, los Commanders se han convertido en uno de los equipos más dinámicos de la temporada.
Ahora, los Commanders (6-2) gozan de su mejor inicio de campaña desde 1996, cuando arrancaron con marca de 7-1. Y buena parte de la transformación se la deben a un Daniels que hace de todo, menos comportarse como un quarterback novato.
Nada ejemplifica esa transformación como el hecho de que hace apenas un año, Washington fue la 25ta mejor ofensiva en puntos de toda la liga y actualmente ocupa el tercer lugar. Además, los Commanders acumulan apenas tres pérdidas de balón en la temporada, la menor cantidad para un equipo luego de nueve compromisos desde 1933, cuando la estadística se hizo oficial.
“Deben dejar de llamarlo un quarterback novato”, dijo el veterano tight end Zach Ertz. “Podrá ser un pasador novato en términos de años en la liga. Pero su madurez y su temple son los de un veterano de 10 temporadas”.
No hay nada mejor que no mostrarse como un novato ante unos Steelers que ostentan la segunda mejor defensiva de toda la NFL, un equipo que sólo ha concedido más de 20 puntos en un encuentro en la temporada y que tiene en Mike Tomlin a un entrenador que se jacta de comer quarterbacks de primer año en el desayuno.
Tomlin tiene un registro de 25-6 en toda su carrera ante pasadores novatos, incluidas dos derrotas el año pasado.
Pero estos Steelers se parecen en muy poco a los de 2023. Por principio de cuentas, esta versión es capaz de poner puntos en el marcador (31,6 por encuentro durante su racha actual de tres victorias). En segundo lugar, su defensiva es la mejor de la liga en las últimas 20 yardas y la cuarta mejor con 15 robos de balón.
Daniels tendrá las manos llenas. Si bien Washington ha superado a sus rivales 85-44 durante su propia racha de tres victorias, también es una realidad que sólo se ha enfrentado a dos conjuntos con registro ganador a estas alturas de la temporada.
Esos números podrían perder relevancia con una sólida actuación ante un equipo que, al igual que los Commanders, se ha ganado por derecho propio la etiqueta de contendiente.
San Francisco y Tampa Bay iniciaron la temporada con grandes expectativas, mismas que se han visto descarriladas ante las lesiones de algunas de sus principales figuras. Esta semana, sin embargo, sólo uno de estos dos equipos recibió buenas noticias.
Los 49ers, que tienen marca de 14-1 en noviembre y diciembre en las últimas dos campañas, podrían tener de regreso al estelar running back Christian McCaffrey —actual Jugador Ofensivo del Año— para su debut en la temporada.
No podría ser más oportuno. San Francisco ha navegado un mar de inconsistencia en la temporada y el regreso de McCaffrey podría solucionar una de sus principales flaquezas, la cuarta peor efectividad en zona roja. No es un aspecto menor, tomando en cuenta que el domingo los 49ers van a necesitar puntos.
Los Buccaneers, que perdieron a sus dos receptores titulares en el mismo encuentro hace dos semanas, han encontrado la manera de mantenerse productivos gracias a los 23 pases de touchdown del quarterback Baker Mayfield, la mayor cantidad en toda la liga.
Ante unos 49ers que apenas acumulan 20 capturas, Mayfield podría tener tiempo para encontrar a sus receptores y poner puntos en el marcador. Pero ése no ha sido el problema para unos Bucs que han admitido 34 unidades en promedio en sus últimos tres compromisos, todos con resultado adverso.
Ningún equipo goza de tanta ventaja dentro de su división como los Bills de Buffalo. Eso se debe en buena medida a una racha de cuatro victorias y al énfasis en el cuidado del balón que finalmente le ha dado al quarterback Josh Allen la dimensión que le faltaba para ascender al olimpo de los pasadores actuales en la NFL.
Armado con una ofensiva que ha alcanzado los 30 puntos en sus últimos tres cotejos, y seis veces en la temporada, Buffalo viaja a la casa de los Colts, donde nunca ha ganado en sus dos compromisos anteriores.
En esta ocasión, Indianápolis enfrenta un enorme desafío. Nada a lo que no esté acostumbrado. Los Colts son el cuarto equipo en la historia que ha visto sus primeros nueve encuentros de temporada regular definirse por ocho puntos o menos. Y para darse una nueva oportunidad ante Buffalo necesitarán que el veterano pasador Joe Flacco regrese al nivel de la temporada anterior.
En su primer inicio desde que fue nombrado titular en reemplazo del inconsistente e inexperto Anthony Richardson, Flacco tuvo su peor rendimiento de la temporada. Los Colts cayeron así ante Minnesota.
Ante Buffalo, tendrá que verse las caras con la octava mejor defensiva de la NFL.
La décima semana de la temporada regular comenzó el jueves con la victoria apurada de los Ravens de Baltimore, por 35-34 sobre los Bengals de Cincinnati, que se arriesgaron a buscar el triunfo en los últimos segundos con una conversión de dos puntos y fallaron.
La acción continúa el domingo con el cuarto partido de temporada regular en territorio alemán en la historia, y segundo en Múnich, donde los Giants (2-7) se enfrentarán a Carolina (2-7). Nueva York tiene registro de 3-0 en Europa.
Además el domingo: Patriots (2-7) en Chicago (4-4); Vikings (6-2) en Jacksonville (2-7); Broncos (5-4) en Kansas City (8-0); Falcons (6-3) en N. Orleans (2-7); Titans (2-6) en LA Chargers (5-3); Jets (3-6) en Arizona (5-4); Eagles (6-2) en Dallas (3-5); y Lions (7-1) en Houston (6-3).
La jornada concluye el lunes con los Dolphins (2-6) en casa de los Rams (4-4). Los Ángeles tiene tres victorias de manera consecutiva. Miami ha perdido sus últimos tres compromisos, a pesar de anotar 27 unidades en cada uno de los dos más recientes.
Browns (2-7), Packers (6-3), Raiders (2-7) y Seahawks (4-5) tienen semana de descanso.
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El periodista de The Associated Press Stephen Whyno contribuyó a este despacho desde Ashburn, Virginia.