La policía australiana recupera 40.000 monedas robadas de "Bluey"
SYDNEY (AP) — Las autoridades australianas recuperaron más de 40.000 monedas de edición limitada robadas basadas en la exitosa serie animada infantil “Bluey”, según informó el miércoles la policía.
Las monedas de Bluey, con un valor nominal de un dólar australiano (65 centavos de dólar estadounidense) cada una, fueron encontradas el martes por la tarde en un negocio de almacenamiento en el suburbio de Wentworthville en Sydney, según un comunicado de la policía.
Bluey es el nombre de una cachorra de pastor azul cuyas aventuras con su familia de perros pastores que viven en la ciudad australiana de Brisbane, donde se produce la serie, se han popularizado entre los niños de todo el mundo.
La serie se estrenó en Australia en 2018 y comenzó a transmitirse en Disney+ en 2020.
Las 40.061 monedas recuperadas aún estaban en las bolsas de plástico de la Real Casa de la Moneda Australiana en las que habían sido robadas tres meses antes, indicó la policía.
La policía fue informada el 12 de julio de que 63.000 de la serie de monedas aún por lanzar, producidas por la casa de moneda nacional en Canberra, habían sido robadas de un almacén en el suburbio de Wetherill Park en Sydney, no muy lejos de donde las monedas fueron recuperadas el martes.
La policía formó el Equipo Bandit para investigar. Bandit es el nombre del papá de Bluey.
Tres personas han sido acusadas por el robo.
Una mujer de 27 años, a quien la policía acusa de haber llevado en auto a dos cómplices al robo de julio, fue arrestada el martes horas antes de que las monedas fueran recuperadas.
Dos hombres habían sido acusados anteriormente por el robo y la policía buscaba a un cuarto sospechoso.
La policía allanó una propiedad en Sydney el 31 de julio y recuperó 189 de las monedas. Descubrieron que el comerciante que las vendía era un coleccionista de monedas legítimo que las había comprado inocentemente por 1,50 dólares australianos (98 centavos de dólar estadounidense) cada una. No se le pagó compensación alguna por las monedas incautadas.
No fue posible contactar con un portavoz de la Real Casa de la Moneda Australiana para solicitar comentarios el miércoles.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.