Argentina acaba con dominio de Brasil en fútbol para invidentes y es finalista en los Paralímpicos
PARÍS (AP) — La racha ha terminado para la selección brasileña de fútbol para invidentes.
El equipo no había perdido en 20 años de competiciones paralímpicas, hasta el jueves, cuando cayó por 4-3 en penales ante la archirrival Argentina, que se instaló en la final.
Tras un empate sin goles, Argentina tomó ventaja en los disparos desde los 12 pasos antes de que el delantero Ricardinho estrellara el balón en un palo. Ello aseguró la victoria de la Albiceleste en los Juegos Paralímpicos de París.
Brasil había dominado este deporte, con cinco medallas consecutivas de oro desde 2004, cuando el fútbol de invidentes se introdujo en el programa paralímpico.
Los jugadores argentinos, encabezados por el delantero Maximiliano Espinillo, quien convirtió el primer penal, celebraron en la cancha, con la Torre Eiffel de fondo.
“Hoy mis pequeños, como llamo a mis jugadores, me han hecho realmente feliz”, dijo el zaguero argentino Froilán Padilla. “Se dejaron todo en la cancha”.
Argentina, que ganó el Mundial del año pasado, se medirá con la anfitriona Francia el domingo, en busca de la medalla de oro.
Brian Bell siguió luciendo en el certamen de basquetbol sobre sillas de ruedas, al anotar 31 puntos y conseguir un doble doble, para que Estados Unidos derrotara 80-43 a Canadá, lo que dejó agendada la final ante Gran Bretaña el sábado.
Bell atinó 14 de 18 disparos de campo y atrapó 10 rebotes.
Gran Bretaña derrotó 71-43 a Alemania y es el otro equipo que marcha invicto en el torneo.
Tatyana McFadden, corredora estadounidense en silla de rueda, parecía enfilada a ganar su segunda medalla de los Paralímpicos, un bronce. Sin embargo, se le descalificó en los resultados oficiales de la final de 400 metros T54, por salirse de su carril.
Lea Bayekula, quien doblegó a McFadden y se quedó con el oro el miércoles en los 100 metros, volvió a llevarse el título, con un tiempo de 54,05 segundos.
El nadador francés Ugo Didier se llevó la plata en el combinado individual de 200 metros, SM9. Consiguió su tercera presea en París y entusiasmó a sus compatriotas en las gradas.
Al marcharse por el túnel, Didier fue recibido con el agitar de numerosas banderas francesas, así como un coro que entonaba su apellido.