Maine aplica periodo de espera de 72 horas para la compra de armas de fuego
PORTLAND, Maine, EE.UU. (AP) — Tras la aprobación estatal de última hora, los vendedores de armas de Maine empezarán a exigir el viernes un periodo de espera de tres días en las adquisiciones en virtud de una de las nuevas leyes de seguridad adoptadas luego del tiroteo masivo más letal en el estado.
Maine se une así a la docena de estados con leyes similares que exigen que los compradores esperen 72 horas para completar el proceso y recoger su arma. La normativa es una de las varias iniciativas relacionadas con las armas adoptadas luego de un reservista del ejército mató a 18 personas e hirió a otras 13 el 25 de octubre de 2023 en Lewiston.
La nueva legislación no habría evitado la tragedia, ya que el agresor adquirió sus armas de forma legal meses antes, pero el hito del viernes fue celebrado por los activistas por la seguridad de las armas, que creen que evitará muertes al ofrecer un periodo de reflexión a quienes compran una con la intención de hacer daño a otros o a sí mismos.
“Estas nuevas leyes sin duda salvarán vidas, tanto aquí en Maine como en todo el país”, dijo Nacole Palmer, directora ejecutiva de la Coalición para la Seguridad de las Armas de Maine.
Los propietarios de armerías criticaron las directrices, publicadas el martes, y la pérdida de ventas a visitantes de fuera del estado durante la ajetreada temporada turística estival de Maine. El periodo de espera afectará también a las ferias de armas, agregaron.
Los detractores de la ley prometieron que la recurrirán ante los tribunales. Sostienen que solo perjudica a los ciudadanos que respetan la ley y no hace nada por impedir que los delincuentes accedan a las armas de forma ilegal. Además, apuntan que quienes buscan autolesionarse buscarán otra forma de hacerlo si no pueden hacerse con un arma al instante.
La ley entró en vigor sin la firma de la gobernadora, la demócrata Janet Mills. Se incluye en el paquete de medidas aprobadas tras los asesinatos masivos en una bolera y en un bar de Lewiston.
