Horschel llega como líder al último día del Abierto Británico bajo una fuerte tormenta
ROYAL TROON, Escocia (AP) — Con una camiseta de manga corta y con su calmado, pero brillante juego corto Billy Horschel se sostuvo de alguna forma para terminar con 69 golpes y dos bajo par para llegar al último día del Abierto Británico e el liderato tras una jornada el sábado en la que todo quedó de cabeza.
Antes de que salieran los líderes comenzó a llover y la tormenta sólo empeoró. El implacable viento golpeó en la cara a los jugadores en los últimos nueve hoyos y quedó a los mejores del mundo golpeando con sus hierros en par-4 —y aún así no llegaron al green.
“Esos han sido los nueve hoyos más complicados que podrías disputar en el golf en este momento”, admitió Dustin Johnson, exnúmero uno y que ha ganado dos majors. Terminó con 72 golpes a 5 del líder.
Shane Lowry no tuvo tan bien día como Horschel y la frustración fue evidente.
Lowry, quien dejó en claro que está listo tras ganar en el Royal Portrush hace cinco años, llegó a estar tres tiros arriba antes de colapsar. Disputó los últimos 11 hoyos con 7 golpes por arriba del par y terminó con una tarjeta de 77 para estar a 3 del líder.
“No hay duda que voy a salir mañana pensando que puedo ganar el torneo”, aseguró Lowry. “Pero es difícil en este momento. Hace 10 minutos tuve un putt para par en el hoyo 18 y estoy aquí hablando con ustedes intentando descifrar como es que tuve 77 golpes”.
Fue así para todos, al menos para quienes tuvieron que lidiar cuatro horas del peor clima.
El sudafricano Thriston Lawrence salió tres horas del último grupo y tuvo seis birdies en ocho hoyos para un 65. Pasó de estar 10 tiros detrás a jugar el domingo al lado de Horschel, un tiro detrás.
Sam Burns no está lejos. Tuvo ocho birdies para tener una ronda de 65 y se encuentra en el mismo grupo, un tiro detrás del líder, junto a Russell Henley, quien evitó lo peor de la lluvia para terminar con una ronda de 66.
Horschel se encuentro 4 bajo par con 209 golpes y por primera vez lidera un major después de 54 hoyos. Sólo en una ocasión ha tenido la presión de un domingo en un major, en el U.S. Open 2013 en Merion cuando inició dos tiros detrás y empató en el grupo 4.
Ahora tendrá otros 18 hoyos en Royal Troon.