Minas norcoreanas podrían llegar al Sur por las inundaciones, advierte Seúl
SEÚL, Corea del Sur (AP) — Las inundaciones podrían arrastrar minas terrestres norcoreanas hasta Corea del Sur, advirtió el miércoles el ejército surcoreano, luego de que el Norte colocó recientemente decenas de miles de explosivos letales adicionales a lo largo de la fortificada frontera que separa a las dos naciones rivales.
El minado forma parte de las obras que Corea del Norte lleva a cabo en la frontera desde abril, que incluyen la instalación de barreras antitanque y el refuerzo de las carreteras. Las autoridades en Seúl creen que Pyongyang busca reforzar su posición de seguridad en el frente e impedir que sus soldados y ciudadanos deserten al Sur.
El Estado Mayor Conjunto surcoreano dijo a la prensa local que las inundaciones causadas por las lluvias estivales podrían arrastrar las minas al otro lado de la frontera, y agregó que el país vecino también podría hacerlas flotar deliberadamente río abajo como provocación.
The Associated Press tuvo conocimiento del contenido de la reunión.
Las preocupaciones por una posible provocación norcoreana aumentaron luego de que Kim Yo Jong, la poderosa hermana del líder Kim Jong Un, amenazó el martes con nuevas contramedidas a los esfuerzos de activistas civiles surcoreanos para lanzar panfletos al Norte en globos. Pyongyang ha respondido antes enviando globos cargados con basura hacia su vecino, que no causaron grandes daños.
En un comunicado, el Estado Mayor Conjunto explicó que el ejército norcoreano ha sufrido “muchas bajas” debido a la explosión de unas 10 minas y por la exposición al calor durante los intensos trabajos fronterizos.
Se estima que hay dos millones de minas repartidas por la frontera terrestre coreana, que tiene 248 kilómetros (154 millas) de largo y 4 kms (2,5 millas) de ancho. Los expertos dicen que ninguna de las dos naciones ha gestionado bien sus minas y no saben exactamente cuántas hay ni su ubicación.
No es extraño que las cajas de madera de las minas norcoreanas sean arrastradas río abajo durante el verano, causando accidentes letales en el Sur. En 2015, la explosión de una mina atribuida al Norte mutiló a dos soldados de Seúl y dejó a los dos rivales al borde de un conflicto armado.
El Estado Mayor surcoreano dijo que está estudiando otras posibles provocaciones de parte del Norte, como disparos transfonterizos a los globos surcoreanos. El ejercito de Seúl está reforzando su preparación para repeler cualquier posible agresión de la hermética nación, agregó.
Corea del Norte es extremadamente sensible a los esfuerzos de los activistas surcoreanos por lanzar panfletos antiPyongyang, que considera como una amenaza a su sistema político y un desafío a su veto a las noticias extranjeras para sus más de 26 millones de habitantes, según los expertos.