El Vaticano preparará documento sobre mujeres en puestos de liderazgo
CIUDAD DEL VATICANO (AP) — La oficina de doctrina del Vaticano preparará un documento sobre las mujeres en puestos de liderazgo en la iglesia católica, en una nueva iniciativa para responder a las demandas de larga data de las mujeres para tener mayor voz en la vida de eclesiástica.
El documento será escrito por el Dicasterio de la Doctrina de la Fe como su contribución al gran proceso de reforma de la Iglesia del papa Francisco, dijo el Vaticano el martes. El proceso entrará en su segunda fase principal con una reunión de obispos en octubre, conocida como sínodo.
El Vaticano anunció los detalles del documento doctrinal poco después de su conferencia de prensa sobre los trabajos preparatorios de la reunión de octubre, sin dejar a los periodistas la oportunidad de pedir más detalles al respecto.
El cardenal Mario Grech, organizador del sínodo, no mencionó el documento cuando se le preguntó sobre la cuestión de las diaconisas, limitándose a decir que el asunto había sido remitido a la oficina de doctrina.
El próximo documento se anunció en cambio en una lista de los miembros de 10 “grupos de estudio” que están examinando algunas de las cuestiones más espinosas y legalmente complicadas que han surgido en el proceso de reforma hasta la fecha, incluido el papel de las mujeres y de los católicos de la comunidad LGBTQ+ en la vida de la iglesia.
El papa Francisco convocó el sínodo hace más de tres años como parte de sus esfuerzos generales para hacer de la iglesia un lugar más acogedor para los grupos marginados, y en el que la gente corriente tuviera más voz. El proceso, y los dos años de sondeo entre las bases católicas que lo precedieron, suscitaron tanto esperanzas como temores de que se estaba produciendo un cambio real.
Las mujeres católicas realizan la mayor parte del trabajo de la Iglesia en escuelas y hospitales, y suelen tomar la iniciativa en la transmisión de la fe a las generaciones futuras. Pero llevan mucho tiempo quejándose de su estatus de segunda clase en una institución que reserva el sacerdocio a los hombres.
Francisco ha reafirmado la prohibición de que las mujeres hagan trabajo sacerdotal, pero ha nombrado a varias para puestos de alto rango en el Vaticano y ha fomentado el debate sobre otras formas de hacer oír su voz. Esto ha incluido el proceso sinodal, donde las mujeres han tenido derecho a votar sobre propuestas específicas, un derecho que antes sólo se concedía a los hombres.
Además, durante sus 11 años de pontificado, Francisco ha respondido a las demandas de puestos ministeriales para mujeres nombrando dos comisiones para estudiar si ellas pueden ser ordenadas diáconos. Los diáconos son ministros ordenados, pero no son sacerdotes, aunque pueden realizar muchas de las funciones que los sacerdotes: encabezar bodas, bautizos y funerales, y predicar. Sin embargo, no pueden dar misa.
Los resultados de las dos comisiones nunca se han hecho públicos y en una reciente entrevista con el programa “60 Minutes” de la cadena CBS, Francisco respondió “no” cuando se le preguntó si las mujeres podrían ser ordenadas diáconos algún día.