Asesinan a 2 trabajadores humanitarios en el Congo

GOMA, República Democrática del Congo (AP) — Dos miembros del grupo extranjero de ayuda Tearfund fueron asesinados en un ataque contra su convoy en el este de la República Democrática del Congo, dijo la organización, en el más reciente de una serie de ataques contra grupos de ayuda y residentes de la región.

Los trabajadores humanitarios fueron asesinados el lunes cuando su convoy llegó a la ciudad de Butembo, en la provincia de Kivu del Norte, donde rebeldes armados están combatiendo a las fuerzas de seguridad congolesas, dijo la organización en un comunicado publicado la noche del lunes.

Por el momento, no se sabe cuál fue el grupo responsable del ataque. Más de 120 grupos armados en el este del Congo han realizado ataques, en los que suelen utilizar bombas contra residentes, mientras buscan apoderarse de una parte del oro y otros recursos de la región.

Más de 170 de esos incidentes de seguridad han sido contra trabajadores humanitarios y han causado al menos cuatro muertes, además del secuestro de más de una docena de personas, dijo el martes en un comunicado la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios en el Congo. En el documento también se hace un llamado a la protección de los trabajadores humanitarios.

“En un tiempo de inmensa necesidad de ayuda humanitaria, es inaceptable que quienes trabajan para ayudar a las personas afectadas sean atacados y asesinados”, dijo Bruno Lemarquis, coordinador humanitario en el país.

La violencia en la provincia ha empeorado en los últimos meses mientras las fuerzas de seguridad combaten a los rebeldes. Dos personas fueron asesinadas la semana pasada en la región cuando un ataque con morteros alcanzó una base operada por el ejército sudafricano, que forma parte de una misión regional de pacificación. Los rebeldes también se han apoderado de más poblados en las últimas semanas.

El grupo rebelde M23, que presuntamente tiene vínculos en la vecina Ruanda, ha sido el más activo en la región, ha capturado ciudades estratégicas y controla casi la mitad de la provincia de Kivu del Norte, de acuerdo con Richard Moncrieff, director del Grupo de Crisis en la región de los Grandes Lagos.