Un barco sufre un presunto ataque hutí en Golfo de Adén, grupo iraquí reclama otro en Eilat, Israel
DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — Un buque fue objeto de un supuesto ataque de combatientes hutíes de Yemen en el Golfo de Adén el miércoles por la mañana, mientras que milicianos iraquíes aliados con los rebeldes se atribuyeron otro ataque contra la ciudad portuaria de Eilat, en el sur de Israel, informaron autoridades.
Los ataques se produjeron tras la partida del portaaviones Dwight D. Eisenhower, que estuvo desplegado ocho meses en la zona y dirigió la respuesta estadounidense a los ataques de los hutíes. Dichos ataques han reducido drásticamente el tráfico marítimo a través de una ruta crucial para los mercados de Asia, Oriente Medio y Europa, en una campaña que, según los hutíes, continuará mientras dure la guerra entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza.
Entre tanto, los hutíes fueron acusados de detener aviones comerciales que llevaron de vuelta a peregrinos tras realizar el haj, en medio de una creciente disputa económica entre los rebeldes y el gobierno del país en el exilio.
El ataque al buque se produjo frente a la costa de Adén, informó la agencia Operaciones de Comercio Marítimo del Reino Unido (UKMTO por sus siglas en inglés).
El capitán “de un buque mercante informó que un misil había impactado en el agua muy cerca del buque”, dijo UKMTO. “Se informa que la tripulación está a salvo y el buque se dirige a su próximo puerto de escala”.
La UKMTO no precisó si el buque había sufrido daños.
En tanto, el ejército israelí dijo el miércoles que un dron “cayó frente a la costa de Eilat”. Los militares activaron las sirenas antiaéreas en la zona.
El dron “fue vigilado por soldados (israelíes) durante todo el incidente y no cruzó a territorio israelí”, afirmó el ejército de Israel. “Durante el incidente, se lanzó un interceptor hacia el” dron.
Los hutíes han atacado Eilat en el pasado con drones y misiles. Sin embargo, un grupo con apoyo iraní conocido como Resistencia Islámica en Irak se atribuyó el ataque. Ese grupo comenzó hace poco lo que ellos y los hutíes describieron como operaciones conjuntas por la guerra entre Israel y Hamás.
Los hutíes no reivindicaron inmediatamente el ataque al barco. Sin embargo, pueden tardar horas o incluso días en reconocer sus ataques.
Los rebeldes han atacado más de 60 buques concretos con misiles y drones en su campaña, en la que han muerto un total de cuatro marineros. Desde noviembre han capturado un buque y hundido dos. Estados Unidos ha liderado una campaña de bombardeos contra los hutíes desde enero, y el 30 de mayo lanzó una serie de ataques que mataron al menos a 16 personas e hirieron a otras 42, según los rebeldes yemeníes.
Los hutíes han mantenido que sus ataques van dirigidos contra barcos asociados a Israel, Estados Unidos o Reino Unido. Sin embargo, muchos de los barcos afectados tenían poca o ninguna relación con la guerra entre Israel y Hamás, y algunos se dirigían a Irán.
El general de brigada Yahya Saree, vocero militar hutí, afirmó el martes por la noche que habían atacado el barco MSCD Sarah V., de bandera liberiana y gestión griega. Saree afirmó sin presentar pruebas que los hutíes habían utilizado un nuevo misil balístico en el ataque, lanzado contra un barco que estaba más lejos que en casi todos los ataques anteriores en el Golfo de Adén.
Mientras tanto, el ministro a cargo del haj para el gobierno exiliado de Yemen acusó el miércoles a los hutíes de confiscar aeronaves del portaaviones bandera del país, el Yemenia, que habían llevado a peregrinos de vuelta tras realizar el haj en Arabia Saudí.
“Los hutíes detuvieron cuatro aviones en el aeropuerto internacional de Saná e impidieron su regreso al aeropuerto de Yeda para transportar a los peregrinos de nuestro país que quieren volver a Saná”, escribió en la red social X el ministro Mohammed Shabiba, que pidió a los peregrinos que siguieran en La Meca que se quedaran allí. “Pido a nuestros honorables peregrinos que se instalen en sus casas hasta el regreso de los aviones secuestrados por la milicia terrorista hutí”.
Los hutíes no reconocieron la detención en un primer momento. Sin embargo, al menos dos Airbus A320 asociados con el Yemenia parecían haberse quedado bloqueados en tierra en Saná sin explicación, según datos de rastreo de vuelos.
Los hutíes y el gobierno yemení en el exilio han chocado cada vez más en los últimos meses por asuntos económicos, incluso después de una gran campaña de liderazgo saudí a favor del gobierno que trataba de poner fin a la guerra.
Los hutíes han tenido problemas para conseguir suficiente liquidez para respaldar la economía en las zonas que controlan, y quieren introducir una nueva moneda de curso en la divisa yemení, el rial. El gobierno, exiliado en Adén y otros países, criticó la iniciativa y dijo que los hutíes se estaban dedicando a la falsificación.
Las autoridades en Adén han pedido que todos los bancos trasladen su sede allí como forma de detener el peor declive de valor del rial en su historia y reafirmar su control sobre la economía. Adén también ha presionado para que otros negocios abandonen Saná.
Mientras tanto, los hutíes han capturado a empleados yemeníes locales de Naciones Unidas, grupos humanitarios y la antigua embajada estadounidense en Saná dentro de una gran operación. Siguiendo el ejemplo de sus benefactores iraníes, los hutíes han emitido videos de los cautivos que parecen haberse grabado bajo presión y que alegan que son espías en algunos casos, en ocasiones basándose en emails que elogian su trabajo ayudando a los yemeníes.