Presidente de Parlamento iraní se inscribe como aspirante a la presidencia
DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — El presidente del parlamento iraní, el estricto Mohammad Bagher Qalibaf, emergió el lunes como el más renombrado candidato dentro de la teocracia chií del país en postularse para la elección presidencial del 28 de junio para ocupar el lugar del difunto Ebrahim Raisi, quien murió en un choque de helicóptero el 19 de mayo.
La inscripción de Qalibaf, exalcalde de Teherán con vínculos estrechos con la Guardia Revolucionaria, lo catapultó al primer plano entre un gran número de candidatos, apenas un día después que el expresidente de línea dura del país, Mahmoud Ahmadinejad, también se registrara como candidato.
El líder supremo, ayatolá Alí Jamenei, pronunció el lunes un discurso en que hizo alusión a las cualidades que el mismo Qalibaf ha resaltado, en una posible muestra de apoyo al presidente del Parlamento.
Sin embargo, muchos conocen a Qalibaf por su apoyo, como general de la Guardia Revolucionaria, a una violenta represión de estudiantes universitarios iraníes en 1999. Según los reportes, también ordenó el uso de municiones reales contra estudiantes iraníes en 2003 cuando servía como jefe de policía del país.
En tanto, el apoyo de Irán a los grupos milicianos en Oriente Medio ha estado cada vez más bajo los reflectores mientras los hutíes de Yemen atacan a la navegación en el mar Rojo debido a la guerra de Israel con Hamás en la Franja de Gaza.
Qalibaf, de 62 años, inscribió su candidatura ante el Ministerio del interior frente a una multitud de periodistas el lunes. En declaraciones posteriores a la prensa, señaló que mantendrá el mismo camino que Raisi y el difunto general de la Guardia, Qassem Soleimani, una figura venerada por muchos en el país después de su muerte en 2020 en un ataque de un dron estadounidense en Bagdad.
Qalibf insistió que no permitirá una “nueva ronda de malas gestiones” en el país y mencionó la pobreza y las presiones inflacionarias que afectan a los iraníes mientras la nación pasa problemas ante las sanciones internacionales.
“Si no me registraba, el trabajo que empezamos para resolver los problemas económicos del pueblo en el gobierno popular (de Raisi) y el parlamento revolucionario, y que ahora empieza a rendir frutos, habría permanecido inconcluso”, declaró.
No entró en detalles y aún se desconocen las implicaciones de tales planes en momentos en que la moneda iraní, el rial, sigue en picada y se acerca nuevamente a una tasa de 600.000 por dólar. La moneda operaba a 32.0000 rials por dólar cuando Teherán firmó el acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales.
Al igual que otros candidatos, Qalibaf se abstuvo de discutir directamente el acuerdo nuclear —o los comentarios recientes de funcionarios que aseguran que Irán podría tratar de construir una bomba atómica. La decisión final sobre estos asuntos de Estado sigue siendo de Alí Jamenei, de 85 años, pero, en ocasiones anteriores, los presidentes se han inclinado ya sea al diálogo o la confrontación con Occidente en este tema.