Kyrie Irving dijo al final de la campaña que los Mavs apenas despuntaban. Estaba en lo correcto
Kyrie Irving no estaba amenazando a nadie, ni presumía o dijo algo desmesurado. Era la última semana de la temporada. El escolta y los Mavericks de Dallas acababan de asegurar un título de división e Irving profundizó sobre el significado.
No miró atrás. Miraba hacia adelante.
“Tenemos claro que el trabajo no está finalizado”, dijo Irving en Miami esa noche. “Apenas estamos comenzando”.
Estaba en lo correcto. Los Mavericks, que en febrero y marzo parecía encaminados a disputar la repesca, un equipo que transitaba con una mediocre foja de 26-23 al cabo de 49 partidos, enderezó el rumbo a tiempo, y su presencia en las Finales de la NBA ha sido su recompensa.
Dallas visitará a Boston en el primer duelo por el campeonato de la NBA la noche del jueves. Es un mano a manos entre los equipos de la NBA con los mejores récords desde el 1 de febrero. Boston con foja de 39-9 desde entonces y Dallas con 36-15. Boston también tuvo la mejor foja de la liga antes del 1 de febrero (37-11), mientras que Dallas registró la 14ta mejor en ese periodo (26-22).
“No pasa a menudo en la que pasas de los puestos de la lotería a las Finales", comentó el entrenador de los Mavericks Jason Kidd. “Pero realmente estábamos convencidos de que teníamos el talento”.
Hace un año, no lo tenían. Y tampoco carecían de todo lo necesario cuando empezó esta temporada. Pero desde completaron los canjes por Daniel Gafford y P.J. Washington en febrero, los Mavericks han sido uno de los mejores conjuntos de la liga — con una marca de 16-2 durante un tramo de la campaña regular, lo cual ratificó la sensación de Irving de que estaban para cosas grandes.
“Ese es el tipo de confianza que he sentido en la mayor parte de estos playoffs, sin importar lo que esté pasando, al inicio del juego, a mitad del juego, después del juego. Nuestras consignas de convicción y ser positivos han marcado mucha diferencia”, señaló Irving.
En el actual formato de los playoffs, que se remonta a 1984, Dallas es apenas el quinto preclasificado o por debajo en su conferencia que alcanza las Finales. Miami lo logró el año pasado como el octavo y en 2020 como el quinto. Nueva York lo consiguió en 1999 como el octavo y Houston en 1995 como el sexto. De todos esos equipos, los Rockets fueron los únicos que se proclamaron campeones.
Pero este equipo de Dallas está a un nivel excepcional.
Los Mavericks tienen marca de 11-1 en estos playoffs cuando anotan más de 100 puntos. Han ganado cinco partidos en fila como visitantes durante esta postemporada, igualando su mejor racha de la campaña regular.
Cuentan con un jugador como Irving con la experiencia de haber disputado las Finales en el pasado. Un entrenador en Kidd que fue campeón como jugador — en Dallas, precisamente — y tienen al mejor jugador de esta postemporada en Luka Doncic, quien acudirá a su primera serie por el campeonato.
Irving estaba en lo correcto. Los Mavs apenas comenzaban. Y ahora disponen de la oportunidad para un cierre perfecto.
“Creo que somos un gran equipo”, señaló Donci. “Pero lo más importante, son compañeros excelentes en el equipo. De los jugadores a los entrenadores, todos en el equipo, tenemos muy buen gente y eso es lo más importantes. Somos un grupo unido que sabe jugar baloncesto”.