Vives dedica honor de Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación a juglares colombianos
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Tras una vida abocada a incorporar el folclor colombiano en su música contemporánea, Carlos Vives fue anunciado el miércoles como la Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación 2024.
“No he tenido muchos sueños de esos de gloria, no, pero sí pensé en muchas cosas para ser un artista para la gente y que tiene que ver con los valores de nuestra gente, de la gente que nos enseñó a amar esto que hago”, señaló en una entrevista por videollamada desde Bogotá.
Vives celebra con este honor más de 30 años de trayectoria en los que ha sido un orgulloso embajador de géneros como el vallenato y la cumbia a través de su música original, en la que también ha fluido como cantante y compositor entre el pop y el rock.
Vives ha sido galardonado con 18 Latin Grammy y dos Grammy. Entre sus éxitos destacan “La gota fría”, “Pa’ Mayte”, “La tierra del olvido”, “Fruta fresca” y “Volví a nacer”, con los que ha vendido más de 20 millones de álbumes.
Ahora se suma a una lista selecta de Personas del Año que incluye a Laura Pausini, Juanes, Maná, Alejandro Sanz, Marc Anthony, Shakira, Juan Luis Guerra y Emilio Estefan, entre otros.
El reconocimiento también es otorgado por el compromiso constante de Vives con causas medioambientales y sociales a través de la iniciativa Tras La Perla, la Escuela de Música Río Grande y su sello Gaira Música Local. Vives es también un colaborador de la Fundación Cultural Latin Grammy, a la que estarán destinados los fondos recaudados en su gala.
Al compartir cuál fue la chispa que lo llevó a un camino tan luminoso en la música con géneros folclóricos que, pese a tener letras profundas o a veces tristes, invariablemente hacen vibrar el corazón y la mayoría de las veces lo acercan a la felicidad, Vives recordó a los músicos tradicionales o “juglares” que su padre y su tío solían invitar a su casa los fines de semana cuando era pequeño.
“Por eso hoy que me avisan esto, pienso mucho en ellos y pienso mucho en esa gente que me rodeó en mi infancia, que me enseñó a amar todo esto y es gente que, si hoy lo pienso, no lo tenían tan fácil, no lo tenían todo”, dijo.
“Yo decía, ‘yo quiero ser como ellos’, porque a pesar de las cosas difíciles que tenían que vivir, el momento del acordeón, el momento de contar las historias, el momento de cantar no importaba nada, importaba la gente, importaba servir a la gente”.
Pero hace 31 años tomar la decisión de apostar por los géneros tradicionales no fue sencillo. Era un actor conocido en Colombia, pero para la música comenzó desde abajo, cantando en bares y a pesar de que todos le señalaban que siguiera un camino pop, se mantuvo fiel a su interés por la música de sus raíces.
“Donde uno tiene conectado el corazón a algo que no te importa si no te va a oír nadie, no te importa si la industria te dice que no, no te importa, hay algo en el corazón que me ataba a mi música, al camino que escogí”, señaló.
Es algo que Vives define como una modernidad propia.
“No apostarle a la fama que me ofrecía cantar otras cosas”, dijo. “Buscar mi modernidad a partir de mi música local, que es una herencia grandísima de cumbia, vallenato, porro, chandé, chalupas, de bambucos, de pasillo, de torbellino”.
El camino que inició Vives ha continuado a lo largo de las décadas y se mantiene en las nuevas generaciones que siguen incorporando el vallenato y la cumbia en propuestas de pop, rock e incluso música urbana latina.
“Mi compromiso es con las nuevas generaciones, porque al final tenemos que enseñarle a las nuevas generaciones que hay que ser originales, que no basta con copiar eso que nos gusta, ni parecernos al artista que nos encanta, sino que cada quien trae un mundo, cada artista tiene un mundo por entregar, un mensaje para decir”, dijo.
“Sean auténticos, aprovechen algo que llevan muy dentro para que sean artistas diferentes, innovadores y realmente exitosos”.
El propio Vives fue un joven músico rodeado de leyendas, cuando llegó a la primera edición de los Latin Grammy como el artista más nominado hace 25 años.
“Yo volteaba a ver y estaba Celia Cruz y estaba Tito Puente, estaba Johnny Paheco, estaba Cachao (López), estaba Julio Iglesias, estaba Roberto Carlos”, señaló. “Todos estaban ahí, y cuando llegaron los Latin Grammy fue una gran emoción, estaba Emilio, estaba Gloria (Estefan), que han sido como los papás”.
En noviembre, cuando tenga su gran noche como Persona del Año en Miami, Vives será agasajado por artistas, aún por revelar, que interpretarán sus canciones, siguiendo la tradición de la ceremonia celebrada en la semana de los Latin Grammy que se entregarán el 14 de ese mes.
“Lo voy a disfrutar mucho, lo voy a compartir con todos mis amigos, sé que van a estar ahí mucha gente que empezamos aquí en Colombia hace 30 años”, apuntó, aunque también reconoció que tiene sentimientos encontrados por la gente que le hubiera gustado que estuviera ahí y “se nos fue hace poquito”, como el maestro mexicano Armando Manzanero, quien dijo que tuvo el gusto de encontrar en un concierto Latin Grammy Acoustic Session que ofreció Vives en México en 2016.
El 1 de septiembre, Vives se presentará en concierto en Mérida, Yucatán, de donde era originario Manzanero, y el 7 de septiembre en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México como preámbulo para su homenaje en los Latin Grammy.