WNBA espera que el efecto Caitlin Clark continúe con su carrera profesional
NUEVA YORK (AP) — El mundo del baloncesto no se cansa de Caitlin Clark. Y ahora que llegó a su fin la temporada del basquetbol colegial femenino, lo que sigue es el draft de la WNBA.
No hay mucho suspenso. Casi todos piensan que la base de Iowa será la primera selección. Lo que sí hay es emoción sobre su llegada.
Clark se une a la WNBA en el momento correcto tras registrar ratings sin precedentes para una final de la NCAA y en casi cualquier partido que disputó. Al final del próximo año llega a su fin el contrato actual de derechos de televisión de la liga, y el arribo de Clark podría llevar a un nuevo convenio colosal.
La última campaña fue la más vista en las últimas 21 de la WNBA, con un promedio de 462.000 televidentes por partido a través de ABC, ESPN y CBS.
Además, las Finales entre Nueva York y Las Vegas fueron las más vistas en 20 años. Se registró un incremento del 36% con respecto a la campaña anterior.
La asistencia a los encuentros de la liga subió un 16% —la mayor cantidad desde el 2018. Con la llegada de Clark, ese número podría incrementarse de forma exponencial.
“Cuando te dan una oportunidad, el deporte femenino prospera”, aseguró Clark. “Creo que eso ha sido lo más increíble para mí en este trayecto. Empezamos la temporada frente a 55.000 personas en Kinnick Stadium y ahora llega a su fin frente a una audiencia de 15 millones o más por televisión. Continúa mejorando".
Clark inspiró a mujeres y hombres jóvenes a ver y asistir a partidos de baloncesto colegial. La WNBA espera que ese entusiasmo la siga a Indiana, a donde llegaría como la primera selección del draft del próximo lunes. La WNBA ya decidió mover los encuentros de Indiana a una arena más grande.
“Sé que tiene un gran peso sobre sus hombros debido a lo que tiene que darle al baloncesto femenino. Sólo quiero agradecerle. Agradecemos que eligiera al baloncesto”, dijo la entrenadora de Carolina del Sur Dawn Staley.
Ciertamente incrementará la asistencia del Fever, que fue penúltimo en cuanto a asistentes en casa con un promedio de 4.000 aficionados.