Rescatan a más de 130 niños secuestrados en Nigeria después de 2 semanas
KADUNA, Nigeria (AP) — Más de 130 niños que fueron secuestrados hace dos semanas de su escuela en el estado de Kaduna en el noroeste de Nigeria fueron rescatados el domingo y reciben apoyo psicológico antes de ser devueltos a sus familias, informaron funcionarios militares y gubernamentales de la nación africana.
Las autoridades escolares habían indicado al gobierno estatal que un total de 287 estudiantes habían sido secuestrados después de que hombres armados a bordo de motocicletas invadieron la remota escuela de Kuriga el 7 de marzo. Sin embargo, el gobernador de Kaduna, Uba Sani, informó el domingo a la prensa local que sólo 137 jóvenes habían sido secuestrados durante el ataque.
“Todos ellos han vuelto a salvo a casa”, declaró el gobernador en una transmisión en los canales de televisión de Lagos. The Associated Press no pudo ponerse en contacto con habitantes ni autoridades escolares del poblado de Kuriga, el cual no cuenta con servicio de telefonía celular.
Este tipo de variaciones en los informes son comunes en la crisis de secuestros de Nigeria, a veces por deficiencias en los registros o porque algunos rehenes logran escapar momentos después de ser secuestrados.
“Como gobernante, no debería molestarme con las cifras. Lo que es más importante es el regreso de los niños”, señaló el gobernador.
Al menos 1.400 alumnos han sido secuestrados en escuelas nigerianas desde 2014, cuando milicianos del grupo Boko Haram capturaron a cientos de niñas en el poblado Chibok, en el estado de Borno, en 2014. En los últimos años, los secuestros se han concentrado en las regiones centrales y noroccidentales del país, donde docenas de grupos armados atacan con frecuencia a aldeanos y viajeros para exigir rescates.
Los 137 niños fueron rescatados en el estado de Zamfara, un enclave conocido porque allí se cometen secuestros, el cual está ubicado a más de 200 kilómetros (124 millas) de la escuela, indicó en un comunicado el mayor general Edward Buba, vocero militar nigeriano.
Las fuerzas armadas nigerianas difundieron imágenes en las que se ve a los niños con aspecto de cansancio y cubiertos de polvo, todavía con sus uniformes de color azul, blanco y marrón, mientras eran trasladados luego de su liberación. Dirigentes del poblado de Kuriga se sumaron a otros funcionarios del gobierno a la espera de su llegada a la casa de gobierno del estado de Kaduna, que las autoridades postergaron hasta el lunes.
Los niños estaban “de buen ánimo” y recibían apoyo psicológico y atención médica, añadió el gobernador.
Al menos otros 17 alumnos fueron rescatados en el estado norteño de Sokoto dos semanas después de su secuestro, según un comunicado emitido el sábado por el gobierno estatal de Sokoto.
El presidente Bola Tinubu, que enfrenta una creciente presión para poner fin a los secuestros masivos en el norte de Nigeria, prometió que su gobierno “está aplicando estrategias detalladas para garantizar que nuestras escuelas sigan siendo santuarios seguros de aprendizaje, no guaridas para secuestros sin sentido”.
Tinubu había prometido rescatar a los niños “sin pagar un centavo” como rescate. Pero es habitual pagar rescates, a menudo organizados por familias, y es raro que las autoridades nigerianas reconozcan los pagos.
Ningún grupo ha reclamado la autoría del secuestro en Kaduna, que la población local atribuye a grupos de delincuentes conocidos por realizar asesinatos masivos y secuestros para reclamar dinero en la región norteña, azotada por conflictos. La mayoría son antiguos pastores en conflicto con comunidades establecidas.
Al menos dos personas con amplios conocimientos de la crisis de seguridad en el noroeste de Nigeria dijeron a The Associated Press que se conoce la identidad de los captores.
Murtala Ahmed Rufa’i, profesor de estudios sobre paz y conflicto en la Universidad Usmanu Danfodiyo, y el jeque Ahmad Gumi, un clérigo que ha negociado con los delincuentes, dijeron que éstos se ocultan en los extensos y anárquicos bosques de la zona.
Es raro que haya detenciones tras los secuestros masivos en Nigeria, ya que por lo general las víctimas son liberadas sólo después de que las familias desesperadas pagan rescates o a través de acuerdos con funcionarios, que en ocasiones involucran la liberación de miembros detenidos de las organizaciones delictivas.