Bélgica desmantelará un pelotón del ejército por violencia y acoso
BRUSELAS (AP) — Un pelotón de unos 30 soldados perteneciente a las Fuerzas Armadas de Bélgica será desmantelado debido a casos graves de violencia y acoso, anunció la ministra de Defensa el jueves.
Ludivine Dedonder dijo que varias personas estaban ya bajo protección mientras que los sospechosos habían sido cesados o trasladados a otras unidades. Según la ministra, dentro del ejército belga no hay cabida para ninguna forma de “sexismo, racismo o extremismo”.
En una conferencia de prensa junto al jefe de Defensa, el almirante Michel Hofman, Dedonder dijo que fue informada de los casos de violencia dentro del Cuarto Batallón de Ingenieros por correo electrónico en noviembre. Fue alertada por un familiar de uno de los soldados víctima de la situación, añadió.
Se abrió una investigación de inmediato, apuntó, centrada en “actos graves” de violencia.
“Entre otras cosas, estamos hablando de tratos degradantes, agresiones, chantajes, amenazas entre soldados, presiones por parte de soldados a compañeros y la obligación de guardar silencio sobre estos hechos", explicó la ministra.
Los hechos se produjeron durante novatadas y sesiones de entrenamiento, duraron varios meses y en ellos participaron oficiales, suboficiales y soldados de menor rango, dijo.
“Estos comportamientos son inaceptables” y por ello Bélgica ha tomado medidas firmes, incluyendo el desmantelamiento de un pelotón dentro del Cuarto Batallón en la ciudad oriental de Amay, indicó la ministra, apuntando que la institución adoptará una política de tolerancia cero.
El batallón de Amay se formó en 1913 y un año más tarde combatió en la Primera Guerra Mundial. Tiene una gran reputación dentro del ejército belga.
“No es toda la plantilla la que está afectada", dijo Dedonder. “En este momento hablando de unas pocas docenas de personas”.
Hofman y Dedonder indicaron que no podían ofrecer más detalles acerca de la identidad de los implicados ni de la naturaleza exacta de la violencia porque la investigación seguía abierta.
“Estamos hablando de comportamientos degradantes, humillaciones, como parte de novatadas o rituales de integración", manifestó la ministra.