EEUU tendrá su primera revancha presidencial desde 1956, y otros datos sobre el duelo Biden-Trump
WASHINGTON (AP) — Justo cuando los estadounidenses pensaban que se había terminado, Joe Biden y Donald Trump les llevaron de vuelta.
La segunda edición de las elecciones de 2020 se confirmó oficialmente después de que el presidente y su predecesor inmediato se asegurasen las nominaciones de sus partidos. Biden y Trump han planteado una película política que el país ya ha visto, aunque la última versión fuera en blanco y negro.
La última revancha presidencial fue en 1956, cuando el presidente republicano Dwight D. Eisenhower derrotó de nuevo a Adlai Stevenson, el rival demócrata al que se había enfrentado cuatro años antes.
Grover Cleveland, por su parte, fue el presidente número 22do y 24to, tras ganar las elecciones de 1884 y 1892.
En lo que a segundas partes se refiere, los aficionados al cine y la política podrían aspirar a que el duelo entre Biden y Trump se parezca más a la aclamada “El Padrino II” que a la con frecuencia denostada “El Padrino III”. Pero se espera que la revancha ocupe un lugar junto a otros ejemplos históricos que se remontan a la fundación del país.
A continuación, un repaso a los precedentes históricos:
Hace 68 años. Después de que Eisenhower derrotara a Stevenson en 1952 y ganara todos los estados salvo nueve, el presidente volvió a enfrentarse a Stevenson cuatro años después y logró una victoria aún mayor.
Hay otros ejemplos de revanchas en contiendas presidenciales, pero hay que remontarse mucho más atrás en la historia estadounidense.
El presidente republicano William McKinley se impuso al demócrata William Jennings Bryan en los comicios de 1896 y de nuevo en 1900. En 1836, el demócrata Martin Van Buren derrotó a William Henry Harrison, del Partido Whig, sólo para que Harrison ganara la revancha y se hiciera con la presidencia cuatro años más tarde.
John Quincy Adams y Andrew Jackson compitieron dos veces por la presidencia. La primera fue en 1824, cuando se impuso Adams, y la segunda en 1828, cuando Jackson se convirtió en presidente derrotando al entonces mandatario.
Luego estuvo John Adams, un federalista que fue el segundo presidente del país, y Thomas Jefferson, un republicano democrático que fue el tercero. Ambos aspiraron a la presidencia en las primeras elecciones presidenciales disputadas para suceder a George Washington en 1796, en las que Adams ganó y Jefferson fue elegido vicepresidente. Cuatro años después, Jefferson volvió a presentarse y derrotó a Adams.
Por ahora, sólo uno.
Grover Cleveland es el único presidente en la historia de Estados Unidos que sirvió dos mandatos no consecutivos. Logró con éxito lo que intenta ahora Trump, recuperar la Casa Blanca ante el rival que se la arrebató antes.
Cleveland, campeón democrático de la lucha anticorrupción y gobernador de Nueva York, ganó por la mínima las elecciones presidenciales de 1884. Cuatro años más tarde ganó de nuevo el voto popular, pero fue derrotado en el colegio electoral por el republicano Benjamin Harrison. Cleveland volvió a presentarse contra Harrison en 1892, y esta vez ganó con facilidad un segundo mandato.
Otros expresidentes han intentado sin éxito regresar a su antiguo puesto.
Tras servir dos mandatos hasta 1877, Ulysses S. Grant buscó la nominación republicana de nuevo en las elecciones de 1880, pero perdió tras enfrentarse en una convención a James A. Garfield. Habría podido optar a un tercer mandato porque la 22da Enmienda, que limita a los presidentes a dos legislaturas en el cargo, no se ratificó hasta 1951.
Tres expresidentes intentaron sin éxito recuperar la Casa Blanca con partidos distintos a los que habían liderado en su victoria, y Teddy Roosevelt fue el que estuvo más cerca.
Roosevelt, un republicano, se convirtió en presidente cuando William McKinley fue asesinado en 1901 y fue reelegido en 1904, pero optó por no buscar otro mandato completo en 1908 y se retiró para dejar paso al sucesor republicano que había elegido, William H. Taft.
Después Roosevelt se alejó de Taft y le desafió en la lucha por la candidatura republicana en 1912. Cuando ese intento fracasó, Roosevelt se presentó a presidente como candidato de su Partido Progresista, que pasó a la historia como el Partido del Alce Macho después de que el expresidente bromeara que se sentía “fuerte como un alce macho”. El demócrata Woodrow Wilson ganó esas elecciones, aunque Roosevelt quedó segundo con 88 votos electorales frente a los apenas 8 de Taft, el presidente saliente.
Millard Fillmore alcanzó la presidencia tras la muerte de Zachary Taylor, el último mandatario elegido del Partido Whig, en 1850. Fillmore intentó sin éxito conseguir la nominación del partido en 1852. Cuatro años más tarde se presentó a presidente por el Partido Saber Nada, pero perdió en todos los estados salvo Maryland.
El demócrata Martin Van Buren fue presidente en 1837 y 1841 y perdió la reelección ante el nominado del Partido Whig Whilliam Henry Harrison. Ocho años más tarde, Van Buren intentó regresar con el Partido Tierra Libre, pero no consiguió ningún voto electoral.