Turquía es responsable de posibles crímenes de guerra en Siria, según HRW
BEIRUT, Líbano (AP) — Turquía es responsable de algunos de los abusos y posibles crímenes de guerra cometidos en Siria, sobre todo contra residentes kurdos en el norte del país, dijo Human Rights Watch el jueves.
Los abusos fueron cometidos por las fuerzas turcas y por facciones armadas respaldadas por Ankara en las zonas que controlan en el norte de Siria, añadió el grupo con sede en Nueva York.
Turquía no respondió de inmediato a las acusaciones incluidas en un nuevo reporte de 74 páginas elaborado por la ONG.
Como potencia ocupante en el norte de Siria, Turquía ha tenido la responsabilidad de restaurar el orden público y la seguridad, proteger a los residentes y procesar a los responsables de los abusos, indicó el informe.
Desde 2016, Ankara ha lanzado tres grandes operaciones dentro de Siria contra la principal milicia kurda del país, las Unidades de Protección Popular o YPG, una facción respaldada por Estados Unidos que Turquía considera una organización terrorista y una extensión del ilegalizado Partido de los Trabajadores del Kurdistán, PKK.
El PKK libra desde hace décadas una insurgencia dentro de Turquía contra su gobierno,
Las incursiones turcas y los posteriores combates han desplazado a cientos de miles de kurdos. Algunos de los que se quedaron contaron a HRW que sufrieron abusos por parte de las tropas turcas y de una coalición de combatientes de la oposición armados y financiados por Ankara.
“Los continuos abusos, que incluyen torturas y desapariciones forzosas de quienes viven bajo la autoridad turca en el norte de Siria, continuarán a menos que la propia Turquía asuma la responsabilidad y actúe para frenarlos", dijo Adam Coogle, subdirector de HRW en Oriente Medio.
“Las autoridades turcas no son meros espectadores de los abusos sino que tienen responsabilidad como potencia ocupante", agregó Coogle. “En algunos casos (los funcionarios turcos) han estado directamente implicados en aparentes crímenes de guerra".
El reporte — titulado “Todo se debe al poder de las armas: abusos e impunidad en el norte de Siria ocupado por Turquía” — documenta denuncias de secuestros, detenciones arbitrarias, arrestos ilegales, violencia sexual y torturas. Human Rights Watch apuntó que también halló que el ejército y los servicios de inteligencia turcos estuvieron implicadas en la comisión y la supervisión de los abusos.
Según HRW, Ankara no ha garantizado la seguridad y el bienestar de la población civil y la vida de los 1,4 millones de residentes en la región está marcada por la anarquía y la inseguridad.
Las mujeres kurdas detenidas reportaron violencia sexual, incluyendo violaciones, añadió el informe, que documentó la detención de bebés de apenas seis meses junto a sus madres.
Turquía dijo que habilitó una zona seguridad en el norte de Siria para que algunos de los refugiados que acoge en el país puedan regresar a casa. Unos 3,6 millones de sirios huyeron al país para escapar de la guerra civil de más de una década.
“La ocupación turca de partes del norte de Siria ha facilitado un clima anárquico de abusos e impunidad. Es lo más alejado posible de una ‘zona segura’”, aseguró Coogle.