Alemania arresta a exintegrante de grupo terrorista; pasó 30 años fugitiva
BERLÍN (AP) — Una exintegrante de la Facción del Ejército Rojo, una organización terrorista alemana ya desintegrada, fue arrestada tras huir por más de 30 años, dijeron el martes las autoridades en Alemania.
Daniela Klette, de 65 años, fue arrestada en un apartamento de Berlín la tarde del lunes. Los investigadores dijeron que en noviembre recibieron una pista del público, pero no dieron detalles. Klette, que tenía un pasaporte extranjero con otro nombre, no opuso resistencia, dijo a la prensa Friedo de Vries, jefe de la oficina de la policía penal de Baja Sajonia. La mujer fue identificada con la ayuda de huellas dactilares. Tras registrar su apartamento, se hallaron dos cargadores y municiones que corresponden a un arma corta, pero no se halló ésta última, indicó De Vries.
Klette es uno de tres exmiembros de la Facción del Ejército Rojo buscados por la policía durante años.
De Vries dijo que el martes se produjo un segundo arresto, pero se ignora la identidad del detenido.
Klette fue trasladada a la ciudad de Verden, en el norte del país, donde un juez ordenó su arresto previo a una posible acusación de seis robos cometidos entre 1999 y 2016.
Klette no se ha pronunciado ante las acusaciones, pero no impugnó su identidad, dijo el fiscal Clemens Eimterbäumer en una conferencia de prensa en Hanover. La investigación de su oficina no incluye ningún delito de terrorismo relacionado con su participación en la organización también conocida como banda de Baader Meinhof.
La Facción Ejército Rojo surgió de las protestas estudiantiles en Alemania contra la guerra de Vietnam. El grupo lanzó una violenta campaña contra lo que sus miembros consideraban como imperialismo estadounidense y opresión capitalista contra los trabajadores.
La organización provocó la muerte de 34 personas e hirió a cientos más. Se declaró desintegrada en 1998.
“Este éxito muestra muy claramente que no importa qué tan lejos en el pasado estén sus acciones, los perpetradores nunca pueden sentirse seguros”, dijo Kathrin Wahlmann, ministra de Justicia de Baja Sajonia.