Bolsonaro guarda silencio ante investigación sobre intento de golpe en Brasil
RÍO DE JANEIRO (AP) — El expresidente brasileño Jair Bolsonaro y algunos de sus principales excolaboradores se reunieron el jueves con la policía como parte de una investigación en torno a las acusaciones de que tramaron un golpe militar para derrocar a su sucesor, Luiz Inácio Lula da Silva.
Bolsonaro llegó a la sede de la Policía Federal en la capital Brasilia, al igual que algunos de sus exfuncionarios, entre ellos asesores militares. El expresidente decidió permanecer en silencio.
Documentos del Supremo Tribunal Federal muestran que los investigadores creen que el supuesto complot involucraba elaborar un decreto firmado por Bolsonaro en el que instruía que, en caso de perder las elecciones de 2022, había que declarar que hubo fraude a fin de justificar una intervención militar y convocar a nuevas elecciones. Bolsonaro nunca emitió el decreto que habría lanzado la etapa final del supuesto plan.
“Bolsonaro nunca ha simpatizado con ningún tipo de movimiento golpista”, dijo su abogado Paulo Bueno a los periodistas en Brasilia.
Nadie ha sido acusado formalmente en el caso.
Se tenía previsto que un total de 23 personas rindieran declaraciones el jueves, 13 de las cuales se encontraban en Brasilia, según un funcionario federal que pidió mantener el anonimato a fin de compartir información. Entre ellos estaba el ministro y compañero de fórmula de Bolsonaro para las elecciones de 2022, el general Walter Braga Netto; un exasesor, el general Augusto Heleno; el exministro de Justicia, Anderson Torres; y el presidente del Partido Liberal de Bolsonaro, Valdemar Costa Neto.
Antes de la reunión, Bolsonaro dijo que probablemente se negaría a formular comentarios a la policía, argumentando una falta de acceso a documentos. “Yo sigo el consejo de los abogados. Si ellos tienen acceso (al expediente) para mañana, obviamente hablaré”, declaró el miércoles en una entrevista con la radiodifusora CBN.
Bueno dijo a los periodistas que permanecer en silencio no era “simplemente el uso del ejercicio constitucional”, sino una estrategia basada en el hecho de que la defensa no tuvo acceso a todos los elementos.
Leonardo Paz, un politólogo de la Fundación Getulio Vargas, una universidad y centro académico en Río de Janeiro, dijo que permanecer en silencio tiene sentido para evitar decir algo incriminatorio o incongruente. Pero también podría ser ventajoso para Bolsonaro porque podría permitirle ver más adelante “lo que dijo todo el mundo” antes de hacer sus propias declaraciones, señaló Paz.
La policía brasileña registró hace unas semanas viviendas y oficinas de algunos de los principales colaboradores del expresidente y de uno de sus hijos, Carlos Bolsonaro. También incautaron el pasaporte del expresidente como parte de la investigación. La policía dijo en un comunicado que fueron tras sospechosos que “intentaron un golpe de Estado”.
Bolsonaro sembró dudas en reiteradas ocasiones sobre el sistema electoral brasileño, nunca aceptó su derrota y se negó a asistir a la toma de posesión de Lula, aunque salió del país y mantuvo un perfil discreto en los días previos a la investidura de su predecesor, el 1 de enero de 2023.
El 8 de enero de 2023, los partidarios de Bolsonaro irrumpieron en edificios de gobierno de la capital.
El expresidente, quien tiene prohibido postularse nuevamente hasta 2030 debido a un fallo judicial en su contra, ha llamado a sus partidarios a manifestarse en una de las vías principales de Sao Paulo el domingo 25 de febrero.
Su abogado, Fabio Wajngarten dijo en Brasilia que esperaba la asistencia de más de 100 legisladores, tres gobernadores estatales y hasta 15 senadores, además de unas 500.000 personas.