Acuña, el Jugador Más Valioso de la Nacional; Ohtani gana en la Americana; ambos por unanimidad
NUEVA YORK (AP) — Ronald Acuña Jr. había esperado este momento.
“Desde el día en que llegué a las Grandes Ligas, siempre supe que quería ser el Jugador Más Valioso”, dijo el venezolano. “Éste siempre ha sido un sueño para mí. Estoy viviendo un sueño que se ha hecho realidad”.
Acuña fue elegido por primera vez el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, en forma unánime, tras convertirse en el único pelotero en la historia de las mayores con 40 jonrones y 70 robos en una misma campaña.
Shohei Ohtani, el astro japonés de los Angelinos de Los Ángeles que brilla lo mismo como lanzador que como toletero, se embolsó el trofeo en la Liga Americana y se convirtió en el primer pelotero de la historia elegido por unanimidad en dos ocasiones.
¿Puede Acuña repetir su proeza de cuadrangulares y hurtos? Se convertirá en el primer miembro del club de los 50-50?
“No trato de predecir nada, pero mientras me mantenga saludable, creo que todo es posible”, respondió.
Ha habido 21 premiados que se eligieron por unanimidad, pero nunca había ocurrido que dos arrasaran con los votos en el mismo año. Los galardones se entregan desde 1931.
Acuña, jardinero derecho de los Bravos de Atlanta, recibió los 30 votos a primer lugar y 420 puntos en la elección por parte de la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica (BBWAA).
Es el tercer venezolano en obtener un premio al Más Valioso, uniéndose a Miguel Cabrera y José Altuve.
Mookie Betts monopolizó los 30 votos a segundo lugar y obtuvo 270 puntos en la elección de la Nacional, seguido por Freddie Freeman, su compañero en los Dodgers de Los Ángeles, quien sumó 227 unidades.
Betts recibió el premio de la Americana en 2018, cuando militaba en Boston, y Freeman fue el Jugador Más Valioso de 2020, con los Bravos.
Acuña ocupó el segundo sitio del Viejo Circuito con un promedio de bateo de ,336 y encabezó las mayores con 149 carreras anotadas, 217 hits, 386 bases totales y 73 robos. Conectó 41 jonrones y se robó 106 almohadillas.
Cuatro veces elegido al Juego de Estrellas, Acuña cumplirá 26 años el mes próximo. Ayudó a que Atlanta ostentara la mejor foja de las Grandes Ligas en la campaña regular, con 104 triunfos.
Luego, los Bravos cayeron ante Filadelfia en la Serie Divisional.
Ohtani, quien ha cautivado al mundo del béisbol con su combinación de poderoso bateo y eficiente pitcheo, finalizó recién su contrato con los Angelinos y se declaró agente libre.
Recibió los 30 votos a primer lugar y totalizó 420 puntos de la BBWAA. Había sido Jugador Más Valioso en 2021, también por unanimidad. El año pasado, finalizó segundo, detrás de Aaron Judge, de los Yanquis de Nueva York.
Corey Seager fue segundo esta vez. Recibió 24 votos para ese sitio y terminó con 264 unidades. Marcus Semien, su compañero en Texas, quedó tercero con cinco votos a segundo lugar y 216 puntos.
La votación se llevó a cabo antes de los playoffs, donde los Rangers conquistaron la Serie Mundial por primera vez en la historia.
Ohtani lideró la Americana con 44 vuelacercas, y bateó para ,304 con 96 empujadas, ocho triples y 20 robos. Su campaña con el bate terminó el 3 de septiembre, debido a una lesión en los oblicuos.
Aunque Ohtani apareció en el anuncio de los ganadores, transmitido por MLB Network, con un perro en su regazo, no habló en la conferencia de prensa programada posteriormente.
Las Grandes Ligas informaron que el japonés no estaba disponible por causas ajenas a su control. No ha charlado con la prensa desde el 9 de agosto, dos semanas después de una lesión que requirió cirugía y que le impedirá trabajar como pitcher hasta 2025.
Ohtani tuvo un registro de 10-5 y una efectividad de 3,14 en 23 aperturas. Recetó 167 ponches y expidió 55 boletos en 132 innings, antes de romperse el ligamento cubital colateral del codo derecho, el 23 de agosto.
Ni siquiera Babe Ruth brilló tanto simultáneamente en el montículo y el plato. Ruth bateó para ,300 con 11 jonrones y 61 remolcadas en 1918, año en que tuvo un récord de 13-7 y una efectividad de 2,22 por Boston.
Un año después, su foja fue de 9-5 y su promedio de carreras limpias admitidas se ubicó en 2,97. Cumplió sólo cinco apariciones en el montículo en sus últimas 16 campañas.