Afectados por el huracán Otis arriban a la capital mexicana para exigir más recursos
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Una caravana de familias y comerciantes afectados por el paso del huracán Otis arribó el lunes a la Ciudad de México para reclamar al gobierno la entrega de más recursos al puerto turístico de Acapulco, donde hay miles de damnificados y cientos de hoteles y comercios destruidos.
La movilización, promovida por opositores al gobierno federal y estatal —ambos ejercidos por el partido Morena—, partió el domingo de Acapulco y pretendía llegar hasta la sede presidencial, en la plaza del zócalo capitalino, para exigir al presidente Andrés Manuel López Obrador mayor atención ante los problemas que enfrenta la ciudad del estado de Guerrero, en la que persisten las fallas en los servicios públicos 12 días después del paso del meteoro.
Pasadas las 3 de la tarde, la caravana, integrada por unos cuarenta vehículos, arribó al centro de la capital mexicana, pero las fuerzas de seguridad le bloquearon el paso y sus integrantes debieron seguir a pie por varias calles. Finalmente llegaron a las cercanías del zócalo al anochecer.
Las autoridades calculan que el poderoso huracán categoría 5, que golpeó las costas del Pacífico mexicano el 25 de octubre, ocasionó afectaciones en 250.000 viviendas, 120 hospitales y clínicas y en más del 80% de los comercios e infraestructura hotelera de Acapulco.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana indicó el lunes en un comunicado que hay 48 fallecidos y 48 desaparecidos.
El opositor Evodio Velázquez, exalcalde de Acapulco y uno de los líderes del grupo, dijo a The Associated Press que unos 200 manifestantes decidieron pasar la noche en varias carpas a la entrada del Palacio Nacional, a la espera de que López Obrador los reciba el martes en su conferencia matutina.
“Buscamos de manera pronta que nuestro puerto de Acapulco pueda ser restaurado”, indicó Velázquez, al cuestionar las acciones que ha seguido el gobierno federal para atender la devastación que dejó Otis.
El opositor precisó que los manifestantes esperan entregar al mandatario un plan de recuperación alternativo de unos 15.000 millones de dólares.
“Queremos un trato digno para Acapulco en el presupuesto de egresos de la federación”, agregó.
Durante su conferencia matutina, López Obrador le restó importancia a la marcha y la atribuyó al “oportunismo” y “politiquería” de algunos adversarios. Mencionó, entre ellos, a la senadora Xóchitl Gálvez, quien será la candidata de una coalición opositora para las elecciones presidenciales del próximo año.
El mandatario dijo el lunes que su gobierno dispone de recursos suficientes para atender la devastación que dejó Otis y anunció que, tras conversaciones con varios empresarios y dirigentes del sector turístico, se acordó que entre marzo y abril del próximo año se reabrirán al menos 35 hoteles en Acapulco.
La semana pasada, el gobierno informó que dispondrá de unos 3.700 millones de dólares para entregar ayudas a las familias, pequeños empresarios y hoteleros afectados por Otis.
El mandatario dijo que se destinarán 10.000 efectivos de la Guardia Nacional para prestar seguridad de manera permanente en la ciudad portuaria de 1 millón de habitantes, que en el pasado fue destino del turismo más glamoroso pero que con los años ha perdido su brillo, en parte por la acción de grupos criminales.
Los manifestantes planeaban protestar el martes frente a las dos cámaras del Congreso de México.