Estirpe de campeona: Martina Weil doma el frío para dar otro oro a Chile en sus Panamericanos
SANTIAGO (AP) — Martina Weil no puso reparo alguno a la ausencia de competidoras de renombre en los 400 metros de los Juegos Panamericanos.
La efervescente velocista de 24 años quería conseguir un oro más para Chile y lo logró.
Por tercera noche seguida, un chileno se coronó campeón en el atletismo de la justa continental. En los 400, aprovechó que la dominicana Marileidy Paulino — la flamante campeona mundial de la distancia — y otras rivales de Estados Unidos y el Caribe desistieron de competir en Santiago 2023.
“Absolutamente, mucha gente muy buena que no llegó", admitió Weil tras ganar su carrera en 51.48 segundos. “Es una tema de oportunidades. El título de Juegos Panamericanos es mío”.
Paulino está en la capital chilena pero optó por correr una distancia más corta — los 200 — y el relevo mixto 4x400 con el que se consagró el lunes. La dominicana vino a perfeccionar la salida, algo que dice es la parte más débil de sus 400. Hizo la mejor marca en los 200 el miércoles e irá por el oro el jueves. Las demás no quisieron acudir por una fecha en la que prefirieron descansar tras haber completado sus temporadas.
Con el camino despejado, Weil no quiso defraudar a sus compatriotas que acudieron durante otra noche de mucho frío, más lluvia, en el Estadio Nacional. Su oro se sumó al que Lucas Nervi obtuvo el lunes en el lanzamiento del disco y al que Santiago Ford — un cubano nacionalizado — logró en el decatlón la jornada anterior.
Y Weil logró sumar un nuevo laurel para su familia.
Resulta que su madre es la colombiana Ximena Restrepo, medalla de bronce en los 400 metros de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 y dos veces medallista de plata en Panamericanos. También ocupa una vicepresidencia de World Athletics, el ente rector del deporte.
El padre es Gert Weil, quien representó a Chile cuatro veces en el impulso de la bala de los Juegos Olímpicos y ganó el oro en los Panamericanos de Indianápolis 1987 y La Habana 1991.
"Aún me queda historia para igualarlos", dijo Martina.
Estados Unidos se alejó en el primer lugar del medallero con una pletórica producción que incluyó una barrida en las cuatro finales de la lucha libre. Cazó también oros en atletismo (lanzamiento de martillo femenino), equitación (salto equipos), esgrima (sable individual masculino) y squash (individual femenino).
La cosecha estadounidense es de 84 medallas de oro y un total de 191.
Brasil se afianzó en el segundo lugar tras consagraciones en atletismo (Lucas Conceicao en los 400 metros) y tenis de mesa, donde Hugo Calderano se convirtió en el primer tricampeón de individuales en los Juegos.
Los brasileños suman 39 oros, cuatro más que el tercero Canadá. México sigue cuarto — también con 35 doradas, pero con menos plateadas) — tras su quinto día seguido sin subir a lo más alto del podio y masticó la frustración tras la derrota 1-0 que la selección masculina de fútbol sufrió ante Brasil en las semifinales.
Argentina sumó su cuarto oro con el inesperado triunfo de la esgrimista Isabel Di Tella en la modalidad de espada individual.
Costa Rica, mediante Andrea Vargas en los 100 con vallas, y Puerto Rico, con Adriana Díaz, en los individuales de tenis, estrenaron su columna dorada.
Perú alcanzó su octavo oro cuando Diego Elías repitió como campeón del squash.
“Aquí lo único malo ha sido el frío. Yo soy antifrío. Con esta temperatura, bajé la velocidad. Cuando corres no lo sientes. Antes de correr, sí”.
Lo dijo Paulino tras su eliminatoria de los 200, quejándose de las temperaturas — 10 grados centígrados (50F) — que no son las ideales para la velocidad.
El atletismo sigue con nueve finales, destacándose los 200 metros en ambas ramas. Además, la natación artística repartirá sus primeros títulos (dúo rutina y equipos rutina libre). La lucha libre y a esgrima también entregarán medallas.